Declaraciones forzosas. El representante permanente de Libia ante las Naciones Unidas, Abdurrahman Mohammed Shalgam.
El mundo reaccionó ante la violencia que se ha registrado en Libia por la represión que ha ejercido el gobieno contra las protestas a Gadafi.
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas condenó el martes los actos de represión emprendidos por el líder libio Moamar Gadafi contra los manifestantes que piden su renuncia, y exigió un alto inmediato a la violencia.
Un comunicado de prensa acordado por los 15 miembros del Consejo el martes por la noche expresó una "grave preocupación" por la situación que se observa en Libia, y condenó la violencia ejercida contra los civiles.
El Consejo instó a un "alto inmediato a la violencia" y a dar pasos para atender las demandas legítimas del pueblo libio.
Estados Unidos condenó el martes la violencia "horripilante" en Libia, donde las fuerzas de seguridad han desatado una represión sangrienta contra los manifestantes que demandan la salida de Moamar Gadafi.
"Esta violencia es absolutamente inaceptable", aseveró la secretaria de Estado, Hillary Rodham Clinton.
"Creemos que el gobierno de Libia tiene una responsabilidad en los acontecimientos y debe adoptar medidas para poner fin a la violencia", dijo Clinton a la prensa en el Departamento de Estado.
"Como siempre, la seguridad y bienestar de los estadounidenses ocupa nuestra mayor preocupación. Sostenemos comunicación directa e indirecta con diversas autoridades libias y con otros gobiernos en la región en un intento por influir en los acontecimientos en Libia", apuntó. Washington considera el retiro de los diplomáticos y civiles estadounidenses ante la violencia que se ha propagado en Libia, en tanto que se ha abstenido de lanzar críticas personales contra Gadafi o exigirle que renuncie.
REACCIONA AMÉRICA LATINA En Buenos Aires, la cancillería expresó en un comunicado que "el gobierno argentino expresa su profunda preocupación por la grave situación en Libia, lamenta la pérdida de vidas y los actos de violencia acaecidos en los enfrentamientos". En Brasilia, luego de una reunión en esa capital, la ministra francesa de Relaciones Exteriores, Michele Aillot-Marie, y su colega brasileño Antonio Patriota, expresaron su preocupación por la violencia en Libia y acordaron cooperar para retirar a sus ciudadanos que deseen salir de ese país lo hagan lo antes posible.