MÉXICO, DF.- Sin mecanismos internos pactados para evitar las "cargadas", el PRI se declaró ayer listo para iniciar la pelea por la Presidencia de la República en 2012.
Durante una reunión a puerta cerrada, la cúpula del tricolor -integrada por gobernadores, coordinadores parlamentarios y líderes de sectores- acordó lanzar hoy lunes la ruta y el calendario para construir la propuesta de Gobierno que ofrecerán en las elecciones del próximo año. Con la definición, también acordaron que la elección del candidato presidencial tendrá que esperar hasta el mes de noviembre.
Para esa fecha, los dos probables aspirantes habrán dejado sus actuales cargos, ya que el gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, entregará su Administración en septiembre, y Manlio Fabio Beltrones, concluirá su gestión como presidente del Senado. Anoche, en una primera conferencia de prensa, el vocero del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), David Penchyna, reconoció que su partido no tiene otro mecanismo más que sus estatutos para evitar las "cargadas" hacia alguno de los aspirantes.
Aunque adelantó que la dirigencia no permitirá que se sobrepasen los límites establecidos en sus documentos básicos, reconoció que están obligados a ser respetuosos frente a las expresiones de sus militantes.
Según el vocero, las verdaderas "cargadas" o "cargaditas" sólo se viven al interior del PAN, donde los siete aspirantes presidenciales -según dijo- apuestan a esa práctica, pero tratando de ocultarla. Durante la encerrona de cuatro horas -a la que acudieron 17 de los 19 gobernadores-, los priistas decidieron evadir la polémica generada ante un eventual acuerdo electoral con la presidenta del SNTE, Elba Esther Gordillo, y el Partido Nueva Alianza, que ella misma fundó.
