La mayoría de las chihuahuenses afectados por el brote de influenza A H1N1 tuvo contacto directo con ciudadanos estadounidenses que tenían el virus, dijo ayer el gobernador César Duarte.
Al dar inicio a una campaña de vacunación para reforzar la protección entre la población, el mandatario expuso que una mujer que murió a consecuencia de la enfermedad realizó un viaje a Texas, donde se tienen registrados 226 casos positivos. En Nuevo México, agregó, hay 344 casos positivos de influenza de los cuales 43 corresponden al virus A H1N1.
Hasta el sábado, las autoridades estatales de Salud tenían registrados 5 casos confirmados, 4 defunciones, 11 hospitalizados y 23 casos sospechosos. Duarte indicó que en Chihuahua no se minimiza el problema ni se toman acciones de manera irresponsable, que afecten la economía y confundan a la población.
A partir de esta acción de vacunación generalizada, que incluye centros educativos y de trabajo externó, se reforzará el cerco sanitario.
Además convocó a la población a no automedicarse para no ocultar la enfermedad, ya que esto representa un riesgo mayor; y pidió retomar medidas de higiene como lavarse las manos continuamente, taparse boca y nariz al estornudar.
"Estas acciones, junto a la vacuna, son suficientes para mantener un cerco sanitario fundamental y romper las cadenas del brote que puede poner en riesgo la salud", manifestó el gobernador.
En tanto, la secretaría de Salud de Tamaulipas inició un cerco sanitario en los municipios de Tampico, Madero y Altamira, ubicados al sur de la entidad, para evitar el contagio en la población.
