Luego de ser detenido y deportado desde Estados Unidos, la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) consignó a un sujeto que defraudó a varias personas prometiéndoles placas para transporte público a cambio de dinero en efectivo.
La dependencia capitalina informó que el inculpado es Antonio Pimentel Alzate, cuyos fraudes le permitieron obtener ganancias ilícitas que superan los 330 mil pesos.
De acuerdo con las causas penales 22/2001 y 106/2002, en 1999 el defraudador recibió a varias personas en su despacho jurídico localizado en la colonia Buenavista, donde ofreció negociar el trámite de placas de servicio público y amparos a cambio de dinero en efectivo.
En total recibió 270 mil pesos; sin embargo, nunca entregó las placas de taxis y microbuses que había ofrecido a sus clientes, a quienes les había endosado recibos membretados con el logotipo del bufete jurídico Alzati-López y Asociados S.C.
Posteriormente y de acuerdo con otra denuncia presentada, el 15 de junio del mismo año el probable defraudador pidió una camioneta y 60 mil pesos a otro agraviado, al cual le prometió la entrega de cinco juegos de placas, con engomados y títulos de concesión incluidos.
Tras no cumplir tampoco con la entrega de lo prometido a esta persona, Pimentel Alzate huyó a Estados Unidos, donde permaneció oculto durante casi una década hasta que en 2008 fue localizado y detenido.
Concluido el proceso de análisis jurídico de su situación migratoria y el de deportación, el sospechoso fue finalmente expulsado del país vecino y entregado a agentes de la Procuraduría General de Justicia capitalina en la ciudad de Matamoros, Tamaulipas.
Antonio Pimentel Alzate fue remitido al Juzgado 11 en Materia Penal del Reclusorio Norte, el cual había girado previamente las órdenes de aprehensión correspondientes.
