Violencia. Ante las múltiples ejecuciones registradas durante las últimas semanas, el Gobierno del Estado afirma que tomará las medidas que sean necesarias para controlarlas.
Ante la creciente ola de violencia que dejó ayer un saldo de 17 muertos en unas cuantas horas, el titular del Ejecutivo estatal, Jorge Herrera Caldera, no descartó la posibilidad de implementar un Mando Único para coordinar un operativo similar al que se realiza en la Comarca Lagunera.
"Son condiciones que habla de una situación de un gran número de acontecimientos y de hechos que lamentablemente se están presentando, estamos ya en este momento interactuando con las Fuerzas Federales para tomar acciones sobre estos acontecimientos", declaró Herrera Caldera al mediodía de ayer, previo a la entrega de la plaza ubicada frente al Arzobispado de Durango, que fue nombrada Juan Pablo II.
Poco después de amanecer ya se tenía conocimiento de seis cuerpos decapitados afuera de una escuela secundaria, otros cinco en el poblado Las Bayas, la confirmación del hallazgo de 11 cuerpos en otra fosa clandestina y dos personas asesinadas.
El Gobernador del Estado manifestó que se tiene un grupo de agentes de la Policía Federal y un "grupo extraordinario" del Ejército Mexicano, pero afirmó que se hará lo que sea necesario para abatir dichos niveles de violencia aunque esto implique solicitar más refuerzos ante las instancias respectivas.
Durante su discurso en la entrega de la plaza Juan Pablo II y acompañado por el nuncio Apostólico de México, Christophe Pierre, y el arzobispo de Durango, Héctor González, Herrera Caldera rememoró los mensajes de Juan Pablo II en los que pregonó que al margen de credos y razas se debe construir una sociedad con valores, donde el odio y la cultura de la muerte sean transformadas por la paz, la concordia, el respeto y la cultura de la vida.
El siglo de durango
