¿Corto o largo para mí?
El rostro es quizá el rasgo más memorable de la primera impresión que damos a los demás. Por eso es básico saber que más allá de la expresión y el arreglo facial, el marco elemental para la cara es el cabello, de ahí que sea tan importante saber definir si nos conviene más llevarlo corto o largo.
Desde tiempos ancestrales el cabello es parte sustancial de la personalidad. En algunas culturas su peinado o extensión ha tenido implicaciones religiosas o sociales. Aun en nuestros días la forma de arreglarlo puede simbolizar muchas cosas, desde un impecable gusto y hasta rebeldía o descuido. En ese sentido, tu pelo puede ser un aliado para verte bien o un enemigo capaz de hacerte lucir terrible.
Sabemos que para que una cabellera luzca hermosa requiere de un adecuado mantenimiento. No obstante además de cuidar que esté sana, es fundamental saber en cuál de sus estilos puede ayudarnos a vernos mejor, es decir usándola larga o corta.
Y es que las modas van y vienen, pero en cada época hemos visto que hay tanto cortes pequeños como impactantes melenas. A veces las tendencias se inclinan más por una u otra longitud, y sin embargo los dos han estado presentes de manera permanente, por ejemplo en los años sesenta era común ver las copiosas cabelleras de los hippies, y al mismo tiempo se veía el pelo muy corto, a la garçon, que muchas jóvenes lucían para enfatizar las demandas de igualdad entre los sexos.
Sin embargo, independientemente de las modas existe una serie de cuestiones que resulta imprescindible tomar en cuenta a la hora de decidir si lo ideal para ti es un cabello largo o un corte discreto. Pon atención:
Estatura. Las personas muy altas pueden darse el lujo de llevar el pelo de longitud mediana o corto, y el largo también les luce bien. En cambio las bajitas se ven mejor con estilos reducidos, cuando mucho a la altura de los hombros.
La nariz. Si tienes una nariz recta y alargada, tu imagen se beneficia con el pelo a la altura de los hombros, peinándolo sin raya en medio y dándole volumen a los lados.
El mentón. A la gente de mentón grande se le recomienda evitar el cabello corto, así mismo peinar la melena tras las orejas.
Las orejas. Si te tocaron unas orejas grandes y poco armoniosas, recurre al largo de tu pelo para disimularlas. Es suficiente con que lo dejes crecer hasta los hombros.
El cuello. Un cuello grueso y alargado se puede disimular dejando que el cabello cubra la nuca. Para el que es chico y grueso se sugiere un estilo cuadrado a nivel de los hombros. El cuello breve y delgado se verá mejor con el pelo corto, buscando darle volumen en la parte superior de la cabeza. Mientras que la gente de cuello largo y delgado puede darse el lujo de elegir tanto el cabello corto como el crecido.
La frente. Si tu frente es chica, lo apropiado es que acostumbres llevar el pelo mediano o largo. Si tienes frente amplia sólo recuerda que el flequillo te favorece.
El cráneo. Si es puntiagudo o pequeño disimúlalo dejando crecer tu melena. El cabello muy corto o rapado sólo le va a un cráneo de figura perfecta.
NO OLVIDES VERTE EN EL ESPEJO
Otro punto esencial para definir si es apropiado usar el cabello corto o crecido es la forma de cara que se posee. Párate enfrente del espejo, identifica cuál es tu tipo de rostro y en seguida toma nota de lo siguiente. Si tu cara es:
Redonda. Se verá magnífica con el pelo corto o de mediana extensión, con las puntas invertidas hacia dentro o bien un ligero bucle, pero siempre con flequillo lateral para contrastar volúmenes. También se pueden dejar unos cabellos cortos, pegados o aplastados a los lados. Las melenas muy largas se aconsejan sólo para quienes tienen además un cuello largo y delgado.
Cuadrada. A esta cara hay que darle altura. Se sugiere un corte sesgado en el área de la nuca. Hay que mantener las mejillas despejadas y acentuar la feminidad procurando no cortar demasiado el pelo y peinando algunos mechones en ondas suaves a los lados. Los cabellos muy lisos no benefician a este tipo de perfil.
Corazón y diamante. Son rostros de pómulos muy salientes, por lo que se les recomienda utilizar el pelo a la altura de los hombros, en medias melenas, y dando volumen al cabello a la altura del cuello. Son asimismo adecuadas las cabelleras rectas con un ligero flequillo grafilado. Debe evitarse a toda costa el pelo corto, o largo y aplastado.
Ovalada y alargada. Esta es la cara más favorecida por la Naturaleza a la hora de lucir una mayor variedad de estilos de corte; en resumen: ¡se ve genial con cualquier longitud!
LA EDAD TAMBIÉN CUENTA
Sin duda la edad también es un factor a considerar a la hora de hablar de cortes de cabello. No es un secreto que con el paso de los años la mayoría de la gente suele comenzar a perder pelo mediante su caída, y que a la vez disminuye la velocidad de su nacimiento y crecimiento. En este sentido, un tip para que la melena luzca más saludable, nutrida y atractiva es mantenerla con un corte pequeño o moderado, digamos hasta un largo medio.
En cualquier etapa de tu vida, si no estás muy segura de cuál es la longitud de pelo ideal para ti pide asesoría a un profesional. No olvides las reglas elementales en lo que a cabello se refiere: 1) asegúrate de que el corte que te harán contribuya al buen aspecto de tu imagen; 2) lo lleves corto o largo, cuídalo y péinalo como se debe.
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