Afganistán. Una mujer reza mientras abraza a su hijo y esperan el regreso de su marido de Afganistan. En la segunda fotografía el feliz reencuentro.
Buscando alinearse con un público atribulado por la incertidumbre económica y frustrado con Washington, el presidente Barack Obama declaró ayer jueves que no es el país el que está mal, sino los políticos.
Su enérgico mensaje se produjo en momentos en que una serie de sondeos muestran que la gente está furiosa con la disyunción política y culpa a todo el mundo, incluyendo a Obama.
En su primer viaje oficial fuera de Washington desde verse confinado a la capital del país durante más de un mes para lidiar con el debate de la deuda, Obama dijo que los estadounidenses tenían razón al preocuparse por el desempleo de 9,1% en el país y las fluctuaciones en la bolsa de valores. El contencioso debate partidista en Washington este verano, dijo, ha empeorado las cosas.
"Desafortunadamente lo que hemos visto en Washington en los últimos meses ha sido el peor tipo de partidismo, el peor tipo de estancamiento, y ese estancamiento ha minado la confianza pública, y ha obstaculizado los esfuerzos para dar los pasos necesarios para nuestra economía", dijo Obama durante un discurso en una planta en Michigan que fabrica baterías para vehículos de energía híbrida.
Un sondeo del Washington Post, dado a conocer esta semana mostró un profundo descontento con Washington. Casi 80% de los encuestados dijeron que están insatisfechos con la forma en que funciona el sistema político del país, comparado con 60% en noviembre de 2009. Setenta y uno por ciento dijeron que el Gobierno Federal se concentra en los asuntos erróneos, comparado con 55% en octubre de 2010.
Tanto Obama como los congresistas republicanos fueron blanco del descontento. Apenas 19% de los encuestados dijeron que el presidente había conseguido progresos en la solución de los problemas principales del país, y apenas 10% dijeron lo mismo de los republicanos. Al mismo tiempo, 28% dijeron que Obama ha empeorado las cosas, mientras que 35% dijeron que los republicanos las habían agravado.
Obama le pidió al público que le diga a los congresistas en Washington que está hastiado de las peleas y los estancamientos.
"Ustedes deben decirles a ellos que ya basta de teatro, que están hastiados de politiquería, que dejen de emitir notas de prensa y comiencen a aprobar las leyes necesarias para ayudar a la economía ahora mismo", dijo el mandatario. "Eso es lo que tienen que hacer. Tienen que escucharlos a ustedes".
Pese a los llamados de Obama a acciones urgentes, el Congreso entró en receso para sus vacaciones de agosto, y Obama muy pronto hará lo propio, descansando en Martha's Vineyard. Pero el presidente dice que no hay razones para convocar a los congresistas a Washington.
"Lo último que necesitamos es que el Congreso se pase más tiempo discutiendo en Washington. Tienen que salir y pasarse más tiempo escuchándoles a ustedes".
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