La Secretaría de Gobernación (Segob) descartó que las críticas del presidente Felipe Calderón en contra del Partido Revolucionario Institucional (PRI) puedan afectar la convocatoria para llevar a cabo un periodo extraordinario de sesiones que destrabe la agenda legislativa, cuyos temas tienen hasta tres años de rezago.
En conferencia de prensa, el subsecretario de Enlace Legislativo de la Segob, Rubén Fernández, reconoció que se requiere el consenso de todas las fuerzas políticas para sacar adelante los asuntos pendientes, porque "si el PAN dice sí, pero el PRI no, no jala, si el tricolor dice sí y los demás no, tampoco".
"No es una petición a una sola fuerza política, sino a la Comisión Permanente y lo cierto es que estos proyectos legislativos tienen hasta dos y hasta tres años esperando en las cámaras legislativas", aseveró.
Descartó que haya terrorismo político en el país, como lo ha denunciado la dirigencia del PRI, por lo que aclaró que casos como el del ex gobernador de Chiapas, Pablo Salazar Mendiguchía, son del fuero común, en tanto que en asuntos como el de Jorge Hank Rhon, las lleva a cabo la PGR cuando ejerce sus facultades técnicas.
"Creo ahí puede haber confusión, el caso del ex gobernador de Chiapas es del fuero común, en el que nada tiene que hacer el gobierno federal, el otro, es un tema de la PGR que ejerce sus facultades técnicas, que no tiene que ver con este asunto".
En su propuesta para llevar a cabo un periodo extraordinario de sesiones, el presidente Felipe Calderón consideró siete temas: las reformas política y laboral, la Ley de asociaciones público privadas y la Ley de seguridad nacional, además de la integración completa del Instituto Federal Electoral (IFE) son exigencia del mandatario para dicho periodo.
En materia de seguridad y justicia, está la minuta de la Cámara de Senadores; la minuta en materia de Ley federal para la Prevención del “Lavado” de dinero, la minuta sobre el robo de hidrocarburos y la Ley Federal anticorrupción.
El subsecretario Fernández dijo que no tiene duda de que los grupos parlamentarios y el Ejecutivo federal puedan alcanzar un acuerdo maduro orientado a generar los temas legislativos que el país necesita al margen de campañas electorales, cuyas actividades "siempre tensan la relación de todos".
"Sentimos que son temas totales para el país, que nadie ha minimizado, la reforma laboral, hay posiciones encontradas, sentimos que a pesar de los diferentes puntos de vista, se ha tomado con la seriedad que amerita", destacó.
