A unas horas de que un juez penal defina si se dicta o no la formal prisión al exgobernador Pablo Salazar Mendiguchía, damnificados del huracán "Stan" - azotó a Chiapas en 2005- exigieron con una marcha multitudinaria que se consignen las más de 30 averiguaciones previas que hay en su contra y se le finque responsabilidad por el desfalco de los recursos para la reconstrucción.
Paralelamente, otros grupos inconformes de maestros e indígenas encarcelados en el gobierno pasado y que iniciaron un plantón y huelga de hambre a las afueras del penal, donde se encuentra el exmandatario estatal, exigieron aplicar la ley contra Salazar.
La manifestación afuera del centro penitenciario reúne a madres y familiares de los 30 bebés fallecidos en 2002 en el hospital regional de Comitán de Domínguez. Al exgobernador se le acusa de presunta negligencia.
Manuel Collazo Gómez, líder de la Organización de Pueblos Evangélicos de los Altos de Chiapas, preso por más de ocho años en el desaparecido penal Cerro Hueco y El Amate, por el gobierno de Salazar Mendiguchía, demandó que "Pablo rinda cuentas y reciba el peso de la ley".
En la manifestación en la ciudad de Tapachula, los inconformes reclamaron que "no basta que Pablo Salazar esté en la cárcel", y exigieron que las investigaciones se extiendan al senador perredista, Rubén Velázquez, y al diputado federal panista, Carlos Martínez, exfuncionarios en el gobierno de Salazar, a quienes acusaron de ser cómplices en el desvío de recursos para la reconstrucción por "Stan".
