Pendientes
Uno los va dejando.
Por diferentes causas.
Y la más importante es el paso del tiempo, que va cobrando facturas e impidiendo completar tareas.
Entre lo que ha quedado para que otros retomen la tarea están trabajos periodísticos, de investigación, que no hemos podido terminar.
Entre ellos podemos mencionar lo que iniciamos hace varias décadas como ese tema que se volvió de carácter internacional y que bautizamos como La Zona del Silencio.
A fines de los sesentas, del siglo pasado, el Ing. Harry de la Peña descubrió, en las cercanías de Ceballos, Dgo., por su trabajo de supervisión de las redes de Petróleos Mexicanos, donde laboraba, una zona donde las ondas de radio se perdían.
Esto lo comentó con este servidor y fue así como nació el tema de La Zona del Silencio, que atrajo la curiosidad mundial, y pronto empezaron a llegar investigadores de todas las partes del planeta para buscar las causas de ese fenómeno, al que con el tiempo se agregaron otros, como la caída frecuente de meteoritos en determinadas épocas del año, así como el que las brújulas enloquecían en el lugar.
Poco después cayeron ahí los fragmentos de un cohete Athena y esto provocó nuevas especulaciones.
Y un día dimos a conocer que Petróleos Mexicanos perforaba en el lugar.
Algo debe haber bajo la superficie del lugar que ocasiona fenómenos interesantes que un día se darán a conocer.
Queda pendiente también el tema de los pigmeos en la Sierra de Durango, conocido desde hace muchos años como el de "los francisquillos" porque dicen se trataba de seres pequeños que vestían como si fueran religiosos, con diminutas sotanas.
Hace poco veíamos en la televisión internacional nuevas investigaciones que se realizan sobre el tema.
Éste y otros casos están a la espera de que alguien tome la estafeta y los continúe.
