Defensa de acero
Existen bastantes razones para suponer que Mike Tomlin le dará a los Acereros de Pittsburgh su séptimo título. Simplemente pregunten a Don Shula, un miembro del Salón de la Fama que sabe mucho sobre cómo ganar el máximo partido de la NFL.
"Pienso que los Acereros son excepcionales a la defensiva", dijo el dos veces ganador del Super Bowl como entrenador de Miami. "Y además el quarterback sencillamente mantiene en curso las jugadas... Simplemente pienso que los Acereros son más fuertes en conjunto", agregó.
Eso no es nada prometedor para los Empacadores hoy domingo por la noche, a pesar de que son favoritos por dos puntos y medio.
"Siempre hemos tenido resultados bastante buenos cuando no somos los favoritos", dijo Art Rooney II, presidente del equipo. "Eso no me molesta para nada".
Ni a nadie más de los Acereros, en realidad.
"La mayoría de los expertos consideran que son un mejor equipo que nosotros", comentó el safety Ryan Clark. "Así que sólo vamos a salir y jugar duro y vamos a poner tanta fuerza física como sea posible".
Ese enfoque agresivo podría dar a los Acereros una de sus mayores ventajas. Los adversarios tienen los moretones para probarlo.
"Tenemos que golpearlos", agregó Clark. "Eso incluye detener la carrera, ir por su quarterback, golpear a sus receptores cuando atrapan el balón y no permitir carreras después de la recepción. Va a ser un juego de poder físico de una defensa muy poderosa físicamente. Pienso que es la única forma de combatir su explosividad", indicó.
Ten cuidado Aaron Rodgers, porque por ahí entran Troy Polamalu y James Harrison.
Incluso con quarterbacks indescifrables -y Rodgers es uno de los mejores- Polamalu es una pesadilla en la forma en que trabaja independientemente en la defensa secundaria.
En una jugada puede atravesar la cobertura y capturar al quarterback, y en la siguiente puede realizar un movimiento espectacular para evitar que se complete un pase.
Con la defensiva deteniendo la ofensiva de los Empacadores, Ben Roethlisberger y los Acereros pueden acudir al corredor Rashard Mendenhall para conseguir yardas y restar tiempo en el reloj. Ese ha sido el plan de juego toda la temporada: correr, correr y correr, aun cuando la estrategia no rinda frutos al principio de un partido.