Dejan a Eva sin 'gracia'
MÉXICO, DF.- Ya lo sufrió Adriana Barraza con la megaproducción Thor, pero ahora la dolorosa tijera de la edición alcanzó a Eva Longoria en la película mexicana Días de Gracia.
Las escenas que filmó la actriz de Desperate Housewives para la ópera prima de Everardo Gout, tuvieron que ser sacadas en la edición final por así convenir a la trama, afirmó en entrevista Ózcar Ramírez, productor de la cinta que será exhibida fuera de competencia en mayo en el Festival de Cannes, en el marco de la sección Sesiones de Medianoche.
"Vino a hacer un papel pequeño, estuvo una semana de trabajo, en el proceso de edición varias líneas tuvieron que salir, entre esas ella, era toda una línea narrativa.
"Era un personaje pequeño, cuando vimos la película completa duraba 2 horas y media, empezamos a seleccionar las partes a prescindir; ahora está en 2 horas 13 minutos. Fue una decisión difícil, pero la intención era cuidar la trama", aclaró Ramírez.
La actriz vino a México en agosto de 2009 para filmar esa cinta, protagonizada por Tenoch Huerta, Dolores Heredia y Mario Zaragoza, que entrelaza varias historias relativas al problema de los secuestros en el país.
El productor explicó que la participación de Longoria era mínima, y que no quisieron mantenerla solamente para utilizarla como aspecto publicitario.
La ex esposa del basquetbolista Tony Parker filmó algunas escenas en la Colonia Nápoles, durante tres días, tiempo que también aprovechó para comer y reunirse con amigos como Jaime Camil.
De acuerdo con Ramírez, la edición de Días de Gracia ha tenido tres etapas. Primero, el propio realizador hizo el corte; luego, sumó a José Salcedo, el editor de cabecera de Pedro Almodóvar; y, finalmente, a Ervé Schneid, el especialista encargado de esa labor en filmes como Amélie, Delicatessen y Alien: La Resurrección.
Otra a la lista
La cinta El Velador, dirigida por Natalia Almada y que es una coproducción México-Estados Unidos, se presentará en la Quincena de Realizadores, sección paralela del Festival de Cannes, en una sesión especial fuera de competencia.
El documental tuvo su estreno mundial, como parte del Festival Nuevos directores/nuevas películas, promovido por el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA). La cinta retrata desde la visión del velador de un cementerio de la ciudad de Culiacán, Sinaloa, famoso por albergar docenas de criptas de supuestos narcotraficantes.
