Durango

Desalientan producción los combustibles caros

Impacto. Hay productores que han perdido la capacidad de cultivar y hacer las demás labores del campo, ante la carestía de los insumos.

Impacto. Hay productores que han perdido la capacidad de cultivar y hacer las demás labores del campo, ante la carestía de los insumos.

DANIEL ESTRADA

El incremento a los combustibles desalienta a la producción en el campo, sentenció el diputado local Manuel Manuel Ibarra Mirano, quien además señaló que la carestía en los insumos ha derivado en una crisis alimentaria.

Ante ello, no hay una política que fortalezca el precio de la producción agropecuaria y los precios de los insumos son deproporcionados con los costos de producción.

Los precios de los granos básicos se han mantenido y reducido en algunos casos; cuestan lo mismo que cuando el diesel tenía un valor de cinco pesos por litro.

 HAY DESÁNIMO

El impacto negativo de los incrementos a los combustibles en el sector agropecuario es mucho, a tal grado de provocar el desaliento entre los productores.

Los productores ya comienzan a dejar de cultivar porque ya no pueden, no cuentan con el respaldo económico para hacerlo.

El legislador local señaló que es necesario que tanto la Cámara de Diputados, así como los senadores deben hacer algo para que ya termine el constante incremento de la gasolina y el diesel.

La economía de los productores, de los comerciantes y todos los sectores en general ya no soportan tantos incrementos a los combustibles, medida que se justifica siempre, al comparar el precio que estos insumos tienen en Estados Unidos.

 EL SALARIO YA NO RESISTE

Solo que hay una marcada diferencia también en otro aspecto, que no se toma en cuenta. En el vecino país el salario mínimo es de 670 pesos diarios, tomando en cuenta que se paga a siete dólares la hora.

En contraparte, aquí el salario mínimo no alcanza ni siquiera los 100 pesos diarios, comparación que no se toma en cuenta para realizar tantos incrementos a los insumos.

Citó que, en los últimos años, el poder adquisitivo del salario mínimo en México se ha reducido en un 47 por ciento, casi la mitad, mientras que la inflación continúa.

Desde que comenzaron los incrementos a los combustibles, la gasolina y el diesel se encarecen entre un 10 y 11 por ciento al año, según refirió el diputado de Convergencia.

En los casi cuatro meses que van del año, el combustible ya se ha incrementado en 32 centavos, mientras que si persiste la misma tendencia, al final del año, el aumento será casi de un peso (96 centavos).

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