"Ser mujer es una tarea muy difícil, ya que consiste principalmente en lidiar con hombres."
Joseph Conrad
México mejoró ligeramente su lugar en el Índice de Brecha de Género del Foro Económico Mundial. Nuestro país ocupa ya el puesto 89 de 135 países en el informe que se dio a conocer ayer. Es un avance sobre el 91 de 2010 y el 98 de 2009.
La calificación de nuestro país en este índice, en el cual 1 representa igualdad absoluta de géneros y 0 desigualdad total, es de 0.6604. Islandia, con 0.8530, ocupa el primer lugar en el mundo. Le siguen Noruega, Finlandia, Suecia e Irlanda.
No hay que ser un país rico o escandinavo para obtener una de las mejores posiciones. Filipinas está en octavo lugar. Lesotho en noveno, por arriba de Suiza y Alemania. España, en duodécimo, supera a Bélgica, los Países Bajos, el Reino Unido y los Estados Unidos.
Cuba, en el puesto número 20, es el país latinoamericano con menor brecha entre los géneros. Costa Rica está en 25, Nicaragua en 27 y Argentina en 28. México se encuentra rezagado frente países mucho más pobres, como China (61), Bolivia (62), Malawi (65) o Botswana (66).
La mala calificación la obtenemos a pesar de estar empatados en primer lugar, con muchos otros países, en acceso a la educación primaria y secundaria y en expectativa de vida saludable. En contraste, tenemos una pésima calificación en la participación de las mujeres en la fuerza laboral, en la que estamos en el lugar 112, o en equidad en ingresos por trabajo similar, donde nos encontramos en el 111.
Dar un mayor papel a las mujeres en la vida económica no es solamente una exigencia de equidad. Las mujeres son más de la mitad de la población. Si se les impide o dificulta el ingreso a la vida económica, se pierde la aportación de un acervo muy importante de talento de un país.
México puede lograr todavía avances significativos en las oportunidades económicas a las mujeres. La disponibilidad de guarderías es un paso fundamental. En México ha habido progresos, especialmente con la subrogación de guarderías del IMSS y con el programa de Sedesol que permitió el establecimiento de estancias infantiles en casas particulares. Generar un sistema más amplio de guarderías profesionales, sin embargo, es el verdadero reto, el cual se ha vuelto más difícil tras la tragedia de la guardería ABC de Hermosillo.
En el campo mexicano, por otra parte, hay tratos inaceptables que se esconden bajo el nombre políticamente correcto de "usos y costumbres". Millones de mujeres indígenas trabajan de sol a sol en el campo y en otras actividades productivas sin que se reconozca ni remunere su labor. Constituyen una nueva población esclava al servicio de sus maridos o padres.
El que las mujeres tengan igualdad de acceso a la instrucción primaria y secundaria es la puerta para transformar gradualmente a la sociedad. La educación no es una varita mágica que resuelva todos los problemas. De nada sirve, por ejemplo, cuando no hay empleos o éstos no se entregan a mujeres por razones distintas a su capacidad. La experiencia histórica nos demuestra, sin embargo, que cuando las mujeres tienen acceso a la educación, no pasa mucho tiempo antes de que empiecen a transformar su vida y la de sus familias. Si bien las autoridades mexicanas deben hacer un esfuerzo por abrir mayores campos de oportunidad a las mujeres en la economía, la expansión de la equidad de acceso a la educación primaria y secundaria debe ampliarse a preescolar, media y superior.
Parece muy democrático pedir a los ciudadanos griegos que voten sobre el plan de rescate, el segundo a su gobierno, acordado por los países de Europa el jueves 27 de octubre. Las encuestas dicen que lo más probable es que los electores rechacen la propuesta. Pero nadie les está diciendo que esto significaría la quiebra de su gobierno y posiblemente la salida de Grecia del euro. Y 70 por ciento de los griegos no quiere abandonar esta divisa.
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Sergio Sarmiento (oficial)
