CBTIS. Los campesinos continúan apostados afuera del CBTIS 156 y no se van a retirar hasta que la SEP los atienda.
Las actividades académicas siguen paralizadas en el Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios (CBTIS) Número 156, pues la Secretaría de Educación Pública (SEP) no atiende las demandas de los ejidatarios de La Joya que mantienen tomado el plantel.
Como se informó, la noche del martes los ejidatarios de La Joya tomaron el plantel y hasta ayer jueves ninguna autoridad de la SEP había enviado un representante para atender las demandas de los manifestantes.
Al CBTIS sólo han acudido autoridades estatales y los campesinos se nieguen a dialogar con ellos porque aseguran que no están facultados para resolver sus peticiones.
Los campesinos del ejido La Joya tomaron las instalaciones para reclamar un pago de 18 millones de pesos a la SEP.
En 1982 los ejidatarios asignaron tres hectáreas para la construcción del plantel. A cambio de las tierras, las autoridades educativas se comprometieron a darle educación gratuita a los hijos de los ejidatarios, y a contratar a campesinos en el mantenimiento y aseo de la escuela.
Las autoridades educativas también se comprometieron a darle a los campesinos una compensación económica a cambio de las tres hectáreas, pero las promesas nunca se cumplieron.
En 2006, los ejidatarios lograron obtener el título de propiedad de las 3 hectáreas ante todas las autoridades correspondientes. En 2002, la SEP volvió a comprometerse a pagar las tierras con un monto de ocho millones de pesos.
Ahora, 242 ejidatarios reclaman un pago de 18 millones de pesos a la SEP.
Los campesinos permanecen apostados a la entrada del CBTIS 156.
Antecedentes
De acuerdo con los campesinos:
⇒ En 1982 los ejidatarios asignaron tres hectáreas para la construcción del plantel.
⇒ A cambio de las tierras, las autoridades educativas se comprometieron a darle educación gratuita a los hijos de los ejidatarios, y a contratar a campesinos en el mantenimiento y aseo de la escuela.
⇒ En 2006, los ejidatarios lograron obtener el título de propiedad de las 3 hectáreas ante todas las autoridades correspondientes. En 2002, la SEP volvió a comprometerse a pagar las tierras con un monto de ocho millones de pesos.