Un hombre de 46 años sospechoso de haber asesinado a cuatro mujeres en Portugal ha sido detenido y se encuentra en prisión preventiva, después de que sus propios hijos le denunciaran ante la Policía Judicial lusa.
Según informa la prensa local, la Justicia portuguesa ha ordenado su ingreso en prisión preventiva por considerar que hay pruebas suficientes para acusarlo del asesinato en 2000 de una mujer en Aveiro, a unos 300 kilómetros al norte de Lisboa.
Sin embargo, no puede ser imputado por las muertes violentas de tres prostitutas en Lisboa, ocurridas entre 1992 y 1993 y de las que también es sospechoso, porque estos delitos ya han prescrito.
Fueron los propios hijos del acusado los que le denunciaron a la Policía Judicial, a raíz de un conflicto familiar y de tener acceso a un diario en el que éste confesaba los pormenores de los crímenes.
De acuerdo con la cadena de televisión RTP, la policía investiga la posibilidad de que sea el autor de otro crimen en Alemania, país a donde emigró.
A principios de los años noventa, el descubrimiento de las tres primeras víctimas conmocionó al país y el autor de estas muertes llegó a ser bautizado como "el destripador de Lisboa", ya que las mujeres aparecieron con el corazón, el hígado y los intestinos arrancados.
Esos tres casos, ocurridos en las afueras de Lisboa entre el verano de 1992 y la primavera de 1993, prescribieron en 2008, pero el sospechoso puede ser juzgado por el asesinato de la cuarta víctima, perpetrado en 2000.
El detenido, casado y padre de tres hijos, trabajaba en el sector de la construcción civil y ahora estaba desempleado y vivía en Matosinhos (norte de Portugal).
