A la marca de arroz "Morelos", con 68 años en el mercado y preferida entre las amas de casa porque el grano está entero y al guisarse no se pega, no le ha ido bien en los últimos meses.
Sus dueños, los hermanos José Antonio (preso en Puebla por un caso de chantaje) y Santiago González Gutiérrez, durante 2 años engañaron a instituciones financieras nacionales, extranjeras, privadas y de Gobierno para que les prestaran dinero que invertirían en proyectos de la compañía.
La mala administración los llevó a acumular una deuda por 2 mil 600 millones de pesos. "El flujo de efectivo de Arrocera Covadonga, que vendía la marca Morelos de Ecatepec, empezó a fallar desde hace 2 años, porque los dueños pedían créditos para proyectos que no llevaban a cabo o los dejaban a medias y el dinero lo usaban para pagar otras deudas; fue una mala administración", relataron fuentes del primer círculo de la compañía.
"Covadonga tenía una planta en Ecatepec, siete centros de acopio, empleaba a 700 personas y todos sabían lo que sucedía, porque los trabajadores pusieron tablas de madera en los silos para hacer creer que estaban llenos de arroz, pero en realidad había aire, se daban créditos de aire", dijeron. Entre los acreedores de la empresa estaba Granos Patrón y para pagarle le cedieron la planta de Ecatepec, en octubre del año pasado.
Covadonga abastecía con arroz nacional e importado 48 por ciento de la demanda nacional y con la crisis de la compañía el mercado enfrenta desabasto y alzas de precio.
"Estamos preocupados, porque Covadonga era el principal comercializador de arroz y ya estamos viendo que el precio al consumidor ha subido 3 por ciento en lo que va del año porque la oferta está limitada", afirmó Pedro Díaz, presidente de la Federación Nacional de Productores de Arroz.
La empresa importaba 20 mil toneladas de arroz al año y compraba 100 mil toneladas en el país. Con la crisis, algunas arroceras como SOS y Schettino están importando y comprando el producto nacional, pero no en los niveles que tenía Covadonga.
