La propia presidenta ordenó en mayo la reformulación del programa para eliminar cualquier sospecha de que estaría dirigido a promover conductas homosexuales. (Archivo)
El diputado Jair Bolsonaro, defensor de posturas abiertamente homofóbicas, fue blanco el viernes de severas críticas de otros legisladores luego de que sugirió que la presidenta Dilma Rousseff podría ser homosexual.
La bancada del gobernante Partido de los Trabajadores (PT) de Rousseff, anunció que pediría su destitución del parlamento, mientras otros legisladores no escatimaron críticas a Bolsonaro, un ex militar miembro del conservador Partido Progresista (PP) de Rio de Janeiro.
"Creo que él hirió el decoro parlamentario. El incita al odio contra los homosexuales y no sigue los ritos del parlamento, por lo tanto vamos a denunciarlo al Consejo de Etica (de la Cámara de Diputados) y pedir su destitución", anunció el legislador Paulo Teixeira, líder de la bancada del PT en la cámara baja.
La manifestación de Bolosonaro que generó la discordia fue una intervención ante el plenario de la cámara baja el jueves en la que atacó un programa del Ministerio de Eduación dirigido a enseñar a los menores a ser tolerantes con todas las orientaciones sexuales.
El programa llegó a ser conocido como "kit-gay" por grupos evangélicos y conservadores que lo consideraron una forma de promover la homosexualidad en las escuelas.
La propia presidenta ordenó en mayo la reformulación del programa para eliminar cualquier sospecha de que estaría dirigido a promover conductas homosexuales.
"El kit-gay no ha sido sepultado aún. Dilma Rousseff, pare de mentir. Si le gustan los homosexuales, asúmalo", manifestó Bolsonaro en el plenario de la cámara baja. Agregó que "si su asunto es amor con homosexual, asúmalo, pero no deje que esa cobardía entre a las escuelas primarias".
El diputado Domingos Dutra, quien en ese momento presidía la sesión, ordenó eliminar la declaración del acta del día para que no quedara como parte del registro histórico de la cámara.
Bolsonaro posteriormente intentó explicar a periodistas que no pretendía aludir a la orientación sexual de la presidenta, quien es divorciada y madre de una hija, sino a su "amor por la causa homosexual".
De poco sirvió la explicación porque incluso legisladores de la oposición consideraron que sus manifestaciones debían ser denunciadas al Consejo de Etica del Senado y la Cámara de Diputados.
"Puede criticar al gobierno, pero crear un prejuicio, ofender a una determinada persona, ofender a la presidenta de la república por prejuicio, exige una posición seria del Consejo de Etica", comentó el senador Demóstenes Torres, del conservador partido Demócrata de oposición.
Bolsonaro ha sido denunciado en el pasado al Consejo de Etica de la cámara baja por manifestaciones homofóbicas y racistas, pero ha sido exculpado.
El viernes defendió sus manifestaciones e insistió en que el llamado "kit-gay" debe ser "enterrado".
"Yo no tengo que pedir disculpas a la presidenta, todo lo que yo hablo es motivo de denuncia", se quejó Bolsonaro citado por el portal de noticias Terra. "Que me destituyan, pero que tengan la vergüenza de enterrar ese proyecto de kit-gay", añadió.