El legislador del Partido Acción Nacional (PAN) Leoncio Morán ofreció una disculpa a la ciudadanía y a Martha Angélica Ojeda, asistente del diputado del Partido del Trabajo (PT), Gerardo Fernández Noroña, de quien dijo en la sesión del pasado martes la "ofrece (Noroña) a cuanto diputado se le pone enfrente".
Sin embargo, Fernández Noroña reprobó la actuación "misógina del panista" y le pidió la renuncia.
Los distintos grupos parlamentarios también entraron al debate y coincidieron en que no se debe usar la tribuna para dirimir asuntos personales, por lo que conminaron a cerrar de este capítulo "penoso".
El martes en la votación de la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos, el panista Leoncio Morán pidió a la Mesa Directiva la palabra para culpar de difamación al petista Gerardo Fernández Noroña, que minutos antes lo había calificado de "cobarde", por haber atropellado presuntamente y provocado la muerte a una persona hace a 17 años, en Colima.
Sin más, el panista acusó a Noroña de "ofrecer" a su asistente Martha Angélica Ojeda "a cuanto diputado se le pone enfrente".
"Qué se puede esperar de un individuo que ofrece a una mujer, que por cierto está en este momento sentada a un lado de él, su asistente, asesora o no sé qué cosa, quien por cierto también merece todo mi respeto, y la ofrece envuelta en moño a cuanto diputado se le pone enfrente...", declaró.
En ese momento, el presidente de la Mesa Directiva, Emilio Chuayffet, ordenó apagar el sonido del micrófono del panista y concluyó abruptamente la sesión, sin que acabara la votación de la ley de los residuos.
Ya acabada la sesión, el conflicto entre los dos legisladores se traslado a los pasillos, donde se retaron y se agredieron verbalmente. El problema no llegó a los golpes, pero sí provocó que siete dictámenes que estaban a punto de ser ley, los cuales beneficiarían a la población, se quedaran sin ser votados.
