Desde 2008, cuando se disputó la primera edición de este certamen de la LPGA, será la primera vez que Ochoa no aparezca sobre el campo del Guadalajara Country Club.
Conoce este campo a la perfección. El Guadalajara Country Club es como su segunda casa. Podría recorrerlo a ciegas, sin perderse en él. Aquí creció. Fue en este lugar donde sentó las bases para convertirse, años más tarde, en la mejor golfista del mundo. Por eso, para Lorena Ochoa pisar este campo es motivo de alegría, aunque no pueda jugar.
Tiene un motivo permanente de felicidad: la tapatía luce radiante con ocho meses de embarazo. Uno de sus grandes sueños, formar una familia, está a punto de concretarse. El Lorena Ochoa Invitational, que arranca este jueves, extrañará a su anfitriona, pero ella pone su alegría antes que la nostalgia.
"Es muy divertido para mí y de manera muy diferente estar aquí en el torneo fuera del campo. Estoy intentando disfrutarlo. Esto es de una manera diferente para mí. También estoy tratando de prepararme para ser mamá y creo que ya estoy lista para eso. Uno nunca se prepara lo suficiente, pero estoy muy emocionada", afirma Lorena.
Desde 2008, cuando se disputó la primera edición de este certamen de la LPGA, será la primera vez que Ochoa no aparezca sobre el campo del Guadalajara Country Club. Aun así, es una estupenda anfitriona, pues recibe en casa a muchas de sus mejores amigas. En el reencuentro, las saluda y platica con ellas.
“Les estaba diciendo que es divertido. Es algo que estoy tratando de disfrutar. Es diferente, pero también es bueno para mí saludar a las jugadores y estar más involucrada fuera del campo, con entrevistas y pasando tiempo con mis patrocinadores. Me gusta mucho. Voy a disfrutar cada día del torneo desde afuera", señala la golfista en el retiro.
Lorena disfruta cada momento. No para de sonreír. A su lado, la coreana In-Kyung Kim la observa con cariño. El año pasado, la golfista asiática se llevó el título de este certamen y donó su cheque por 220 mil dólares a la fundación de la tapatía.
"Fue una gran sorpresa recibir la noticia aquel domingo. De corazón, siempre le digo gracias y ella lo sabe. Su visita (a la escuela que patrocina la Fundación Lorena Ochoa) fue muy especial. Es diferente cuando ves cuánto se divierten y lo contentos que están los niños. Pusimos una placa con su nombre en la primera aula. Así, ella sabe que la apreciaremos por el resto de su vida", explica la tapatía.
A defender su título
In-Kyung Kim sonríe al escuchar las palabras de Ochoa. Estar en Guadalajara para refrendar el campeonato que obtuvo el año pasado. "Estoy muy contenta de estar aquí y ver a Lorena divertirse con su familia. Es bueno estar aquí defendiendo mi título", asegura la coreana.
"También visité la escuela de Lorena durante el año y fue muy lindo. Nada se compara con lo que hace su fundación. Sentí humildad al ir ahí y ver a todos los niños tan felices. Algún día me gustaría tener mi propia fundación, he estado investigando mucho ese tipo de organizaciones y me gustaría ayudar a los demás, en especial a los niños", concluye Kim.