Disidentes del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) encabezados por el ex tesorero Alejandro Muñoz, realizaron un mitin frente a oficinas de la Secretaría del Trabajo en Paseo de la Reforma, para demandar al titular de esa dependencia, Javier Lozano que no otorgue la toma de nota al dirigente del gremio, Martín Esparza.
De hacerlo, dijeron, el gobierno avalaría las irregularidades que se han cometido y demostraría que cede a chantajes.
El grupo de inconformes, entre los que figuraron liquidados y ex trabajadores de Luz y Fuerza del Centro (LyFC), demandaron a Lozano que se cumpla con la ley y los estatus de su organización y reclaman la posición que les corresponde en el sindicato, del que, consideran, se ha adueñado Martín Esparza el grupo que lo rodea.
Alejandro Muñoz, dijo en entrevista que los grupos disidentes del SME, como el que lidera y el encabezado por el ex dirigente Jorge Sánchez, conformaron "un gran frente" con la finalidad de "recuperar el sindicato y su patrimonio" y demandar al gobierno federal que no le entregue la toma de nota a Esparza, porque se eligió como secretario general en una asamblea estatuaria amañada.
"Si le dan la toma de nota a cambio de que retiren el plantón en el Zócalo, nosotros nos instalaremos inmediatamente ahí, porque ya nos dimos cuenta que el gobierno responde a chantajes y presiones y nosotros también sabemos hacer huelgas de hambre, plantones y salir a las calles", sostuvo.