Atentados. Las armas en manos de la delincuencia han provocado atentados en contra de funcionarios de Seguridad.
Es preocupante la abundancia de armas de fuego de adquisición ilegal en la entidad ya que causan mucho daño y enlutan familias duranguenses, coincidieron el fiscal del Estado, Ramiro Ortiz Aguirre, y el subsecretario de Operaciones de la Secretaría de Seguridad Pública, Juan Rafael Rosales Sida; tan solo durante el año pasado fueron asesinadas 811 personas por proyectil disparado por arma de fuego y durante el mes pasado se contabilizaron 60.
Durango: proliferan fusiles
Ortiz Aguirre informó que es preocupante la proliferación de armas de fuego pero más el ingreso de fusiles, ya sea por la frontera norte o sur, puesto que Durango, de ser una entidad considerada como de "paso" de armas, ahora es un sitio de acopio por la presencia del crimen organizado.
Agregó que este estado, por su situación geográfica, es un lugar fértil para las acciones de la delincuencia especializada y el armamento les da éxito y eficacia, por lo que adquieren fusiles de grueso calibre.
Asimismo, comentó
que aunque este delito es de competencia federal, la Fiscalía combate también el ilícito, pues recordó que son coadyuvantes del Ministerio Público Federal y en la mayoría de las veces que se presenta un hecho delictivo los agentes del fuero común son los primeros que toman conocimiento y posteriormente otorgan las evidencias para auxiliar en la indagatoria.
Campaña de despistolización
Por su parte, Rosales Sida reconoció que a pesar de que el artículo 10 de la Constitución permite al ciudadano contar con un arma de fuego para la defensa de sus intereses y su hogar, debidamente registrada, existen muchas armas en manos de delincuentes que causan mucho daño a los duranguenses y enlutan a muchas familias.
Dijo que esta situación es preocupante para las autoridades y es por eso que constantemente hay reuniones con corporaciones de los tres órdenes de Gobierno para planear estrategias de combate a la delincuencia.
Reconoció que el delincuente también es un ser pensante y que se protege de la Policía, se cuida muy bien; sin embargo, es deber de la autoridad luchar contra ese ilícito.
Finalmente, informó que es constante la campaña de despistolización, pero que pronto se espera iniciar con acciones similares a la de años pasados consistentes en invitar a la ciudadanía a intercambiar algún fusil por dinero en efectivo o material para construcción.
Aseguramiento importante
En lo correspondiente al aseguramiento de armas de fuego en la entidad, según información proporcionada por la Procuraduría General de la República (PGR), en Durango se decomisaron 816 armas durante el 2010.
El documento señala que por cada fusil se abrió una averiguación previa, ya sea por violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos en las modalidades de portación de arma de uso exclusivo del Ejército o portación de arma sin licencia.
Si no acaba el tráfico, de nada sirve
Dentro del mismo tema, el ex procurador general de Justicia, Daniel García Leal, antes de dejar su puesto, declaró que por más estrategias, operativos y elementos que se destinen a combatir al crimen, pocos serán los resultados si no se frena primero el tráfico de armas de Estados Unidos a México.
"Es de manera definitiva, pues si el control en la venta de armas continúa como ha sido, es un problema que se refleja también en territorio mexicano", consignó García Leal.
Y es que de acuerdo con publicaciones estadounidenses, existe un estudio en el que se revela que por lo menos 62 mil 800 de las 80 mil armas confiscadas a los cárteles mexicanos en menos de cuatro años (2006-2010), es decir el 78.5 por ciento, provienen de Estados Unidos.
También se descubrió que el tráfico asciende a unas cinco mil piezas de armamento por año; los modelos más solicitados son los fusiles de asalto AK-47 rumanos y las imitaciones del Bushmaster AR.
"Es un tema que debe ser observado, analizado y con seguimiento de las autoridades federales, la propia Secretaría de Relaciones Exteriores y la Secretaría de Gobernación, en el sentido de los convenios internacionales que se tienen con la Unión Americana, qué avances han tenido en materia de armas y qué resultados han tenido esos convenios de reglamentar de manera específica el tráfico de armas", finalizó el ex Procurador.
Mecánica para el trasiego
De acuerdo con reportes elaborados por el Centro Nacional de Planeación, Análisis e Información para el Combate a la Delincuencia (Cenapi), de la PGR, el principal problema del país es la introducción clandestina de armas y municiones, entre otros factores, por la colindancia con Estados Unidos, uno de los mercados más grandes de producción de armamento en el mundo.
En la misma información proporcionada por la PGR, se dice que de las investigaciones realizadas en México por el Ministerio Público Federal, apoyado por la Policía Federal, el Ejército y por el intercambio de información a través de la asistencia jurídica con las autoridades de justicia de Estados Unidos, se tiene conocimiento de que la modalidad preferida por los traficantes es adquirirlas de manos de los ciudadanos americanos o residentes legales; así median entre los interesados y el vendedor autorizado para ingresarlas al país tanto por los 19 cruceros formales o por la infinidad de puntos ilegales ubicados en la frontera.
Las armas, con características de acuerdo con las necesidades de los integrantes de los cárteles de la droga, pasan de la Unión América ocultas en vehículos terrestres, en llantas de refacción, respaldos de asientos o compartimientos prefabricados en las carrocerías; el tráfico, pues, se hace en "operación hormiga", luego de que fueron adquiridas muchas veces en los llamados "gunshows" o ferias de armas establecidas legalmente.
Durango, parte esencial
De acuerdo con el reporte del Programa Nacional para el Control de Drogas, el tráfico de armas en México se efectúa en sentido inverso al tráfico de drogas, es decir, las armas que ingresan a territorio nacional procedentes de EU siguen las mismas rutas empleadas para el tránsito de enervante, aunque de norte a sur.
Las tres rutas del tráfico de armas y de droga, según la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), son del Centro, del Pacífico y del Golfo; la primera es la que incluye a Durango como parte de una cadena que traslada droga hacia Estados Unidos y que trafica armas al sur.
La ruta del Centro en cuanto a droga inicia en la frontera sur, en el estado de Chiapas, y termina en Ciudad Juárez, Chihuahua, pasa por el norte de Guerrero y Oaxaca, Puebla, Distrito Federal, Querétaro, Guanajuato, San Luis Potosí, Zacatecas, Durango y termina en Chihuahua, mientras que de manera inversa transitan las armas.
