A clases. Reglamentación local se opone a la federal, que permite venta de frituras y refrescos en raciones pequeñas.
Las autoridades locales se apegarán a la reglamentación estatal antiobesidad y no permitirán la venta de frituras ni refrescos en las escuelas, pese a que la Ley Federal de Salud -que ayer entró en vigor- las permite en presentaciones que contienen una porción menor a las tradicionales.
El secretario de Educación en el estado, Jorge Herrera Delgado, dijo que la decisión de obedecer el reglamento autorizado en 2008, y no el recién puesto en marcha, obedece a que en la entidad hay aceptación de las medidas previamente decididas para combatir los problemas de obesidad.
Aseguró que en Durango no se registra problema alguno con las transnacionales que se dedican a la venta de los frituras y refrescos.
No obstante, reconoció que es algo que podría ocurrir: "Claro que la normatividad de México va a venir a impactar y habrá empresas que peleen estar dentro, pero no hemos tenido eso hasta ahorita", sentenció.
Hasta el momento, 900 escuelas se han integrado al proceso para la aplicación del Reglamento de Alimentos, lo que representa un avance de 56% respecto de la meta, que es de 1,612.
Herrera Delgado informó, además, que por incumplimientos al reglamento, puesto en marcha hace más de dos años, ya se han aplicado sanciones a 254 centros educativos, a los que se les clausuraron los establecimientos que vendían productos poco nutritivos.
El secretario vio a la reglamentación como área de oportunidad para empresarios locales que pueden proponer menús sanos.
254
CENTROS
Educativos han recibido sanciones.