Personaje. Bibiano Villa Castillo, director general de Seguridad Pública de Torreón, escaló puestos en menos de dos años y ahora tiene un nuevo reto en la Secretaría de Seguridad Pública de Quintana Roo. EL SIGLO DE TORREÓN
El paso de Bibiano Villa Castillo como jefe de la Policía de Torreón dejó el despido de cientos de agentes, conflictos en la corporación, recomendaciones de Derechos Humanos, un alto índice de robos y homicidios, y la proyección internacional de su persona así como un atentado en su contra.
En enero de 2010 el general fue nombrado jefe de la Policía Municipal de Torreón. Un año tres meses después está próximo a encabezar la Secretaría de Seguridad Pública de Quintana Roo por invitación directa.
Villa en Torreón encontró una "Policía corrupta", como siempre lo pregonó. En dos meses ya había despedido a 100 policías, pero el 13 de marzo de 2010, luego de una huelga, dejó fuera a 400 agentes más.
En cuanto a robos, a Villa los números se le duplicaron y cuatriplicaron. En enero y febrero promedió 360 robos al mes y en marzo y abril alcanzó los 650 robos mensuales. El "foco rojo" constante fue el robo de autos con violencia.
En cuanto a homicidios, el municipio registró en 2010 el índice más alto en su historia reciente con una cifra de un asesinato al día.
Durante su estancia al frente de la corporación ocurrieron ataques masivos a dos bares, cuatro cantinas y una quinta en Torreón, los cuales dejaron decenas de muertos.
Villa llegó a poner a su disposición sus números de teléfono celular a la ciudadanía, al señalar que el servicio de emergencias 066 no era efectivo.
En la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Coahuila ocupó el primer lugar con seis recomendaciones por detenciones arbitrarias dirigidas a un jefe policiaco.
Su estilo directo y temerario al momento de hacer declaraciones atrajo los reflectores de medios internacionales como The Guardian, The Wall Street Journal, L'Espresso, entre otros, los cuales publicaron reportajes sobre la labor del jefe policiaco.
Coordinado con el Ejército, bajo su dirección se logró recuperar un alto número de vehículos robados y en últimas fechas sus subordinados sostuvieron enfrentamientos con civiles armados.
El pasado dos de marzo Villa fue objeto de un ataque en la carretera a Mieleras, donde salió ileso y su camioneta blindada quedó fuera de servicio.
