'El Conde' buscará el Trofeo Coliseo

Torreón, Coah.- Alfredo Ríos "El Conde'', torero tapatío que hoy estará en la corrida donde buscará conquistar el Trofeo Coliseo Centenario, se dijo contento por esta oportunidad de presentarse ante el público lagunero, ante el cual suele tener buenas jornadas en el ruedo.

"La gente de la región me ha tratado muy bien, en esta vida todo te lo vas ganando poco a poco y es importante que Arturo Gilio me tome en cuenta y haya reconocido mi esfuerzo al colocarme en este cartel y en los que he lidiado anteriormente aquí en Torreón", aseguró.

N ¿Es importante el compromiso que te espera con la afición lagunera?

Así es, es difícil ser torero y triunfar tarde a tarde también lo es, pero más difícil es que te reconozcan como tal y quiero agradecer a la afición y al empresario que siempre me han dado mi sitio de triunfador, por lo cual, sin duda como tarde a tarde, saldré con el ánimo de constatar, lucir y ligar bien los tercios.

N ¿Cuál tarde de toros desearías olvidar?

Ninguna, ha habido tardes muy malas que no debes de olvidar porque te dejan una gran enseñanza y experiencia, esas tardes sirven también para no caer o fracasar más adelante, en esta vida todo es bueno y cada día se aprende más, las malas tardes te ayudan a analizarte y con ello a superarte día a día.

N ¿Cuál ha sido el festejo que más has disfrutado?

Todos, pero en especial la tarde del 12 de octubre de 2010, en la que confirmé mi alternativa en la Plaza de Toros Las Ventas en Madrid. Diversos factores contribuyeron para que fuera especial y bonita, el primero fue que en más de 60 años no confirmaba un tapatío en Madrid, después de "Capetillo" fui yo, la cantidad de toreros que han surgido en 60 años y la vida me regaló esa oportunidad y privilegio.

N ¿Fue difícil el ganado que enfrentaste esa tarde?

Fue muy parecido a lo que se torea en Guadalajara, son toros de cinco años, con 550 kilos de peso, un ganado complicado; al igual que las plazas con un público muy exigente. La experiencia adquirida me sacó adelante, pues precisamente en Guadalajara es donde más triunfos fuertes he obtenido a lo largo de mi carrera, he llegado a indultar tres toros en festejos seguidos y eso no lo ha hecho nadie, y en Guadalajara menos. Por ello esa tarde en Madrid quedará grabada para siempre en mi vida.

N Sin duda... ¿una tarde importante en Madrid?

Por fortuna así fue y eso me ha permitido ser tomado en cuenta para colocarme este año.

N ¿Qué le falta a las nuevas generaciones de toreros?

Sin duda el apoyo y promoción, pues por ejemplo no tiene el mismo apoyo un boxeador o un futbolista que un novillero o matador de toros. Los toreros se juegan la vida y son muy buenos. A mí en especial me apoyó Manolo Martínez, él fue mi apoderado, él me hizo, me guió y me formó; me llevaba al campo bravo, me brindaba consejos, en fin, un torero como pocos, que me supo colocar en carteles importantes.

N Difícil la competencia en España...

Muy difícil, pues allá son alrededor de mil matadores y en México llegamos a los 300 alternativados, además, los españoles nos llevan muchísimo tiempo recorrido y con gran profesionalismo en el mundo del toro.

N ¿En qué países de América has toreado?

En Perú, Venezuela y Ecuador, pero sin duda México está muy por encima de sus plazas, aún cuando existen ferias de importancia, encabezadas por empresarios de origen español.

N ¿A qué torero admiras?

A todos, a todos los admiro. Ponerse delante de un toro es cosa seria y más como está la fiesta ahora; no hay mucho dinero y ponerte delante de un toro es mucha afición, claro que hay toreros a los que admiro por su técnica o su personalidad como Arturo Saldívar, Arturo Macías "El Cejas", Eulalio López "Zotoluco", y de los españoles considero que José Tomás es de los que comen aparte, lo que él hace no lo hace nadie o casi nadie, es un torero hecho de otra cosa.

N ¿Todavía queda Alfredo Ríos para rato?

Uno nunca sabe, yo me siento fuerte y con experiencia, pero en el toro uno nunca sabe, tal vez puedo durar 20 años, pero cualquier tarde puede ser la última, cuando tomé la alternativa me decía, haber si toreo otra corrida, y toreaba y triunfaba.