La semana siete de la NFL tendrá el retorno del que fuera una de las promesas del futbol americano como lo es el mariscal de campo Carson Palmer, quien ha firmado para los Raiders después de que su pasador titular, Jason Campbell, se lesionara en el partido del domingo anterior en contra de los Cafés, por lo cual los Malosos tendrán que ofrecer una selección de primera ronda en el draft del año entrante a los Bengalíes de Cincinnati.
En sus épocas colegiales, Palmer ganó el prestigiado trofeo Heisman en el año 2002 jugando para los Troyanos de la Universidad del Sur de California donde su número 3 fue retirado de esa prestigiada facultad y que después de ser la primera selección en el draft en el 2003 con los felinos se negó a jugar con el conjunto de Ohio hasta amenazando de que se retiraría de los emparrillados.
Durante nueve temporadas ha participado en 97 encuentros y ha encontrado a sus receptores en 2,024 ocasiones de 3,217 ocurrencias logrando 154 pases para anotación logrando cinco más por tierra como jugador de los Bengalíes aunque el coach de Oakland, Hue Jackson, que por cierto fue su entrenador en la Universidad y coordinador en Cincinnati, ha declarado que hoy domingo en el juego contra Kansas City, Kyle Boller, será el quarterback titular.
En el juego de comodines de la temporada 2005-2006 entre Bengalíes y Acereros, Kimo von Oelhoffen, liniero del equipo dirigido en ese entonces por Bill Cowher, lesionó a Carson Palmer ¡en el primer cuarto! de ese encuentro justo después de enviar un pase de anotación al desaparecido Chris Henry y que era el camino al Super Bowl XL que se celebró en el Ford Field de Detroit, casualmente ciudad en donde nació Jerome Bettis, corredor de Pittsburgh, que anunció se retiraría cuando terminara esa campaña.
A un buen amigo, fan de los Bengalíes, yo le comenté que esa lesión de ligamento cruzado provocada por el elemento de la defensiva de los Steelers, fue de manera premeditada (y no me quiso creer) porque sabían anticipadamente que, al momento de retirar del emparrillado al egresado de USC, las cosas serían tranquilas para que "El Camión" (seudónimo del running back del equipo de Pennsylvania) y Bill Cowher lograran su anhelo de jubilarse con un anillo de Super Tazón.
Y curiosamente, elementos del famoso equipo del acero, años después confesaron de que esa lesión ya la tenían en mente para abrir el camino al Super Bowl debido a que llevaban 26 largos años que no conquistaban el super domingo porque de antemano garantizaban que derrotando al equipo de Marvin Lewis, la puerta se abría para llegar a Michigan.
Y ya que tocamos el tema de los Acereros (yo no quería), en esta semana se repetirá la edición del Super Bowl XLIII cuando visiten a los Cardenales, que se encuentran en el limbo destacando también, y quién lo iba a decir, a los sorprendentes Leones recibiendo en Detroit a los Falcons de Atlanta.
rcerpa@yahoo.com
