Para armonizar tu vida con el universo y gozarla a plenitud, los viejos de Güémez 'siempre llenos de sabiduría', te aconsejan:
1. Levantarte con actitud mental positiva; sonreír a la vida y a todo aquel con el que tengas contacto es corresponder al Señor por el milagro de la vida.
2. Una sonrisa aporta mucho para darle un sentido propositivo a tu existencia; es una sutil manera de proyectar tu generosidad, bondad, bienestar, amor, luz, sencillez, bendiciones y calidez humana.
3. A pesar del viento en contra y de las tormentas... ¡mantente en pie! Recuerda: que tú llegaste a esta carnalidad para triunfar y ser feliz, y que no hay árbol que no haya sido sacudido por una tormenta.
4. Conserva siempre pensamientos positivos, pues según sean éstos, así te responderá la vida.
5. No permitas que caiga la noche sin haber sido feliz, sin haber trabajado en tu crecimiento personal, sin haber sembrado un amigo, animado o ayudado a otro; que nadie -por más poder político o económico que tenga- te escatime tu legítimo derecho de ser feliz.
6. Hoy, sal a la vida con la decisión de ser el protagonista de tu grandeza.
7. Ten la humildad de valorar los pequeños milagros que están hechos especialmente para ti: el agua, el sol, el aire, las estrellas, la tierra... el amor, todo está hecho para servirte.
8. No remes en contra de tu vida, tampoco viajes en el tren de la mediocridad; ten la humildad de aprender de las abuelas, ellas te enseñan a perdonar para viajar ligero de equipaje.
9. Basado en el poder del amor y del perdón, trabaja en tus emociones reprimidas, serás capaz de liberar resentimientos y rencores para que llegue a ti una reconfortante paz interior descubriendo lo maravilloso que eres y armónicamente te conecte con el universo.
10. Estamos tan acostumbrados a complicarnos la vida, que automáticamente rechazamos la felicidad que da la simplicidad. No seas tú de los que se complican la vida con actitudes o frases ostentosas; simplifica sin restar esencia, recuerda: "Se requiere mucha sabiduría y fuerza para poder ser simple."
11. Mantén encendido tu deseo de estar en movimiento, de crecer, de ser mejor, porque "como son tus deseos, será tu voluntad; como sea tu voluntad serán tus actos y como sean tus actos, será tu destino."
12. Acuérdate del viejo principio: "Cuántas veces so pretexto de enseñar... aprendemos"; ten la humildad de salir a instruirte de todos. Mantener los ojos del espíritu abiertos te llevará a tu natural crecimiento.
13. Por cualquier motivo, en cualquier tiempo y en toda circunstancia: ama; es una energía que no se cuantifica porque no obedece a ningún modelo físico matemático; lo increíble de quien ama es que todo lo ve desde la perspectiva de la felicidad.
14. Enriquece tu conexión con el Señor; cree en Dios 'traerá a ti una regocijante paz interior', cualquiera que sea tu opción religiosa, ya que "Dios es demasiado grande para caber en una sola religión."
15. Recuerda que nadie es inmortal, todos tarde o temprano llegaremos a rendir cuentas al Creador. Todos morimos, pero muy pocos han aprendido a vivir la magia de la vida, esa que hace espectacular cada instante.
16. Cuando dejas que tus problemas sean más grandes que tú, llega el desequilibrio, pero cuando eres más grande que tus tareas, llega la armonía. "No le digas a Dios que tienes un gran problema... dile a tus problemas que tienes un gran Dios."
17. En esta vida cada quien tiene un don, encuentra el tuyo, disfrútalo, enriquécelo, recibe con alegría lo que llega, crea lo que necesitas, haz bien lo que puedas, da con amor y celebra el milagro de vivir.
18. Tu universo interior proyecta tu mundo exterior, escucha en el silencio la sabia voz de tu cuerpo, aprende que la felicidad y el éxito son un camino que se construye en el hoy; éstos radican, no en el dinero o poder que tengas sino en la íntima satisfacción del deber cumplido.
19. Regocíjate con el sentido del humor, te lleva a evitar la crítica o a maldecir, te enseña a alegrarte y sentirte parte del milagro de la vida.
20. Quizá este sea el mejor consejo de nuestros viejos, recuerda que:
"No hay cosa más buena y más sana, que cada quien haga... lo que le dé su 'retiznada' gana."