A través de un lenguaje actual, fresco y coloquial, sin cambiar el texto original, se presentará la obra teatral 'El jardín de los Cerezos', de Antón Chéjov, bajo la dirección de Andrew Upton, que desde el Teatro Olivier, de Londres, se proyectará en el Lunario del Auditorio Nacional, los días 27 y 29 de julio.
En entrevista con los medios, realizada hoy en la Embajada Británica en México, vía telefónica desde Londres, la actriz Emily Taaffe destacó que la producción escénica se establece en el periodo de 1904, por lo que el vestuario, personajes y la estructura social sigue siendo la misma.
'Es un obra atemporal, porque aborda diferentes aspectos, tanto sociales como políticos, en este último rubro se plasman aquellos políticos que utilizan a las personas y el gobierno con los recursos económicos', dijo la actriz, que forma parte del elenco de esta magna producción del National Theatre, de Londres.
Respecto al personaje que interpreta que es Dunyasha, es una mujer que quiere mejorar en el entorno social y también es una joven que tiene la mala suerte de enamorarse de una persona equivocada y todo lo que tiene que hacer por pagar las deudas de la familia.
'Me identifiqué con algunas penurias de este personaje, porque creo que siempre tienes que encontrar algo en un papel que uno interpreta y creo que eso se manifiesta en la inseguridad con la pareja, entonces siento que al estar con alguien no tengo la confianza de que no eres lo suficiente buena para esa persona', aseguró Taaffe.
Destacó que interpretar un personaje de Chéjov es un privilegio, porque él escribe las obras con todo el color de la vida, con todos los personajes que lleva, es un hombre equilibrado e hizo cosas muy buenas cuando trabajó como doctor.
'Los personajes y obras de Chéjov, llevan mucha energía de vida y es algo que me he dado cuenta al representar sus montajes, aunque en algún momento sentí como que su trabajo era un tanto árido o seco, porque no había captado las cosas, y cuando lo haces te das cuenta del increíble nivel de intelecto que presentaba', subrayó Taaffe.
Sobre los retos que implicó montar esta producción, en una nueva versión de Andrew Upton, Taaffe señaló que lo que el director buscaba era lograr una producción en la que se recogieran las voces de los personajes que fueran diferentes y en las que cada uno cuenta su propia historia que va dentro de una general.
'Es como una orquesta en que cada instrumento aporta su parte, entonces aquí cada uno de los papeles tiene un sentido que le da a la historia', señaló.
Apuntó que Chéjov fue igualmente brillante que William Shakespeare, por lo que no lo podría poner como primero o segundo lugar, los dos fueron grandes dramaturgos, que dejaron todo un legado a través de sus textos dramatúrgicos.
La puesta en escena aborda la vida de Ranyevskaya, quien vuelve a casa casi en la bancarrota después de 10 años en el extranjero.
Inmersa en los lujos de su mundo de dinero en desaparición y sin importarle las fuerzas hostiles del mundo exterior, ella y su hermano se cuelan en el adinerado entorno de Lopakhin, un campesino convertido en empresario.