“Fue algo impresionante. Que no dimensionábamos hasta llegar a la ciudad de Tokio y ver las imágenes que transmitían las cadenas informativas. Los medios japoneses ya estaban hablando de más de mil 500 muertos y 80 mil desaparecidos, luego del tsunami que afectó al país, sobre todo la costa norte de Japón y cuya velocidad llegó a 800 kilómetros por hora y alcanzó 8.9 grados en la escala de Ritcher’’.
Así narra consternado el alcalde Eduardo Olmos su experiencia vivida en Japón la noche de este jueves y madrugada del viernes cuando acompañado por Marcos Durán, secretario de Fomento Económico de Coahuila, el presidente de FOMEC, Salvador Jalife, el director de FOMEC, Armando Carlos, el agregado comercial de la Embajada Mexicana, Raúl Urteaga y dos personas más de la embajada nipona, regresaban en el tren bala de la ciudad de Hamamatsu a Tokio.
“Estábamos finalizando la parte más importante de la gira comenzada el pasado lunes tiempo local en Shangai, China, donde tuvimos la oportunidad de entrevistarnos con empresarios chinos que tienen en mente una inversión superior a los 100 millones de dólares en Torreón. Habíamos abordado el tren bala que aquí los japoneses utilizan en un 90 por ciento para sus actividades diarias’’.
Dice que en una zona industrial abierta, el tren bala se detuvo inexplicablemente y sólo veían cómo los cables de electricidad se movían, luego observaron que temblaban los postes y gente empezaba a salir de los edificios.
“Pese a ello el rostro de los viajeros no se inmutó. La expresión de tranquilidad y sin exclamaciones, esperamos que el tren reanudara su marcha. Hasta ese momento y por mensajes telefónicos que hablaban de un terremoto y de alertas de un tsunami nos daba cuenta de lo que pasaba’’. Eduardo Olmos fue entrevistado por El Siglo de Torreón y para Siglo TV, vía Skype. Eran las 5 de la tarde tiempo local y las 6 de la mañana horario de Tokio.
Indica que la ciudad de Tokio no sufrió daños importantes a su infraestructura, sólo se trastocaron los servicios como el de teléfonos y el tren que quedó varado en la ciudad, dejando a miles de japoneses, literalmente sentados en el piso, que esperaban se reanudara el transporte.
Olmos se reportó el viernes temprano con familiares y amigos informando que estaba bien, al igual que los que integran la Misión Comercial que fue en busca de inversiones de las que dijo “tenemos buenos resultados que ya les platicaremos’’.
Aeropuertos Cerrados
Debido al cierre de los dos aeropuertos de la ciudad de Tokio, explicó que se suspendieron los vuelos y ayer viernes gestionaban la forma de regresarse a Torreón con posibilidades de llegar el domingo. “Tal vez lo hagamos vía Detroit-Monterrey. Algunos se van a quedar hasta que se reanuden los vuelos’’.
Olmos se reportó el viernes temprano con familiares y amigos informando que estaba bien.