La expresidenta de Chile y directora ejecutiva de ONU Mujeres, Michelle Bachelet, afirmó hoy aquí que eliminar la desigualdad de género ayuda a reducir otras diferencias sociales en el mundo.
La exmandataria participó en un encuentro informativo del Foro Nueva Economía, como parte de una visita de trabajo donde se reune con autoridades del gobierno y de la sociedad, para hablar sobre el trabajo en el organismo de Naciones Unidas.
Ante representantes de gobierno, diplomáticos y de medios de comunicación, aseveró que luchar por la igualdad de género es hacerlo por un derecho humano y es 'una decisión inteligente para una democracia más representativa'.
'Es la mejor interpretación de los legítimos anhelos de la sociedad y desde la economía es factor esencial. Es cuestión de justicia. Eliminar desigualdad de género permite dar paso para eliminar el resto de desigualdades sociales', recalcó.
Recalcó que una parte importante del esfuerzo consistirá en apostar por generar proyectos para mujeres trabajadoras rurales en países en vías de desarrollo, lo que ayudará a luchar contra la pobreza y garantizar la seguridad alimentaria.
Recordó que hay estudios que muestran que cuando las mujeres tienen ingresos el 90 por ciento de ellos va a la alimentación, familia y el hogar, algo que en porcentajes similares se ve sobre las mujeres migrantes.
'Hay que apostar a las mujeres para darles poder; empoderar a una mujer es empoderar a una comunidad y sacar a las familias adelante', sostuvo.
Lamentó que aún en muchas partes del mundo las mujeres jóvenes de entre 15 y 35 años, padecen violencia doméstica y son utilizadas como armas de guerra, son vendidas para explotación sexual, además de que en las cifras de pobreza y analfabetismo ocupan un lugar muy amplio.
'No hablo de mujeres como víctimas, porque tienen fortaleza y capacidad. Pero si algunas tienen daños hay que apoyarlas. Hay que impulsar a las mujeres como agentes de desarrollo y de cambio. Creo que la fuerza de la mujer es positiva y constructiva', destacó.
Aclaró que no se parte desde cero en esta lucha, pero lo que se quiere es reforzar el trabajo para generar cambios en prácticas y comportamientos, desde casos muy graves como la lucha contra la ablación, como la adopción de prácticas sociales para la igualdad.
'Los cambios culturales, de prácticas, es una tarea monumental, no es algo de la noche a la mañana, al comienzo se tarda parece lento, pero importa que sea más', subrayó.
Bachelet apuntó que el trabajo de ONU Mujeres no sólo se dirige a países en vías de desarrollo, sino también a los desarrollados, donde aún queda mucho por hacer.
'Que nadie piense que ya está todo hecho. Hay que seguir avanzando. No hay nunca suficientes derechos, hay que seguir. Si se mira desde el mercado del trabajo es mucho lo que se puede hacer.