Concierto. La cantante bailó, movió la cabeza, los hombros y parecía no acabar.
El seductor y emocional concierto de Ely Guerra encontró una pausa al final para hacer una dedicatoria especial, como preámbulo de Ojos Claros Labios Rosas.
"La siguiente canción quiero dedicarla a dos mujeres que se encuentran en este momento cantando en otro lugar, eso habla de que la música que hacemos vive un gran momento: Julieta Venegas y Natalia Lafourcade... Ocesa decidió separarnos el mismo día, pero me da gusto porque mostramos de lo que somos capaces. Este es un homenaje a la mujer".
Y fue justo ese remanso lo que amainó la sensual presentación de la jalisciense en el Teatro Metropólitan, en un juego de entregas y complicidades que empezó con Hedonista y Lontano, tema que aprovechó para dar la bienvenida a sus incondicionales que abarrotaron el recinto de la calle Independencia.
Después de interpretar Stranger, la próxima parada estaba marcada en el mapa: "ustedes son una hermosa marea que nos lleva hasta 'Puerto Vallarta'".
"Hace dos años aquí empezamos la gira así", dijo antes de entregar Te Amo, I Love You a una efervescente audiencia.
La cantante bailó, movió la cabeza, los hombros, movió las caderas y la fuente encantadora de sus formas parecía no acabar. Y ella lo sentenció: "y porque no hay nada mejor que un colchón", dando paso al tema homónimo que siguió el idilio.
Las voluntades habían cedido ya cuando la anfitriona hizo la primera de sus dedicatorias con Vete.
"Sabemos que en este país hay sitios muy bellos y quiero dedicar esta canción a los que habitan en la sierra Tarahumara".
El momento consciente duraría sólo unos minutos, pues el pacto de pasión entre Guerra y sus fans estaba sellado y se confirmaría con Bumerang y Colmena.
"Quiéreme Mucho, Tengo Frío, Yo No, Por Qué Tendría Que Llorar Por Ti y una coreada Más Bonita, también fueron interpretadas, así como Mi Playa.
Ojos Claros, Labios Rosas marcaría la satisfacción con una gran interpretación y así prometió volver el año próximo.