Tom Brady y los Patriotas abandonaron el terreno de juego, incrédulos ante la derrota con los Jets de Nueva York. (Fotos de AP)
FOXBOROUGH, Massachusetts.- Resultó que los Jets no eran solamente habladurías después de todo.
Ahora el revoltoso grupo dirigido por el entrenador Rex Ryan se dirige a su segunda final de la Conferencia Americana consecutiva luego de que Nueva York sustentó el domingo las presunciones de su entrenador con una victoria por 28-21 sobre los Patriotas, el equipo que llevaba la mejor foja de la NFL.
Mark Sánchez lanzó tres pases para touchdown, Tom Brady fue capturado cinco veces en el más publicitado de los cuatro partidos de postemporada del fin de semana luego de una semana de ataques verbales entre ambas escuadras.
Nueva York tomó ventaja sobre su archirrival de conferencia por 14-3 al medio tiempo, antes de que Brady mandara un pase de dos yardas para touchdown a Alge Crumpler y de que Sammy Morris corriera para una conversión de dos puntos que acercó a los Patriotas 14-11 en el tercer período.
Sin embargo, Sánchez respondió con un pase de siete yardas para touchdown a Santonio Holmes y Shonn Green finiquitó el encuentro con una carrera de 16 yardas para touchdown.
Los Jets (13-5) mantienen con vida la predicción de Ryan de llegar al Super Bowl. Los Patriotas (14-3) perdieron su tercer partido de postemporada consecutivo.
"Quizás el resto del mundo jamás creyó pero nosotros sí creímos. Estamos avanzando, los mismos Jets han regresado al partido de campeonato de la Conferencia Americana. La única diferencia en esta ocasión es que estamos planeando para ganar", agregó Ryan.
Los Jets perdieron la temporada pasada en la final de la Conferencia por 30-17 ante Indianápolis, pero ahora tienen la posibiidad de ganar su primer boleto a un Super Bowl desde que otro bocón, "Broadway Joe" Namath, vaticinó y cumplió un triunfo de 16-9 sobre los Colts de Baltimore.
Ryan ha dicho muchas veces que los Jets son un equipo de Super Bowl, y ha causado el enfado de seguidores, jugadores contrarios y medios de comunicación con sus osados comentarios. La semana pasada dijo que el partido era una disputa entre él y el entrenador de los Patriotas Bill Belichick. Luego, después de que Antonio Cromartie usó un insulto para referirse a Tom Brady el martes, Ryan dijo que no castigaría a su cornerback.
El ultraserio Belichick no fue tan condescendiente con Wes Welker.
El receptor se quedó en la banca las primeras jugadas de los Patriotas por sus sutiles declaraciones aparentemente dirigidas contra Ryan. Welker hizo varias referencias a los pies en su conferencia de prensa del jueves, interpretadas por algunos como comentarios sarcásticos por los reportes recientes sobre un supuesto fetichismo de Ryan con los pies.
Pero cuando el partido terminó, Belichick caminó lentamente al medio campo, donde se encontró con Ryan, le dio palmadas en la espalda e intercambió algunas palabras.