En lo que pareciera una operación cicatriz frente al sentimiento contrario a la causa española que despertó en el país el bloqueo a la posibilidad de que Pemex tuviera mayor injerencia en el Consejo de Administración de la petrolera Repsol, está en México una misión de empresarios hispanos
Estamos hablando de un grupo de representantes de la Asociación Española de Accionistas Minoritarios de Empresas Españolas Cotizadas, que dirige Henning Wegner.
El objetivo es, justo, plantear las razones por las que se vetó la alianza entre la paraestatal mexicana y la firma constructora Sacyr Villahermoso, accionista mayoritario de Repsol, para sindicar su voto, tras aumentar la primera en 4.8 por ciento su participación.
El intento apunta a deslindar a Pemex de la furia nacionalista desatada, a cuya vera se habló de que se estaba apuñalando la "hispanidad" de la petrolera, cargándole el peso a quien se califica de "socio incómodo"; por más que se insiste en que las firmas están obligadas a presentar una Oferta Pública de Adquisición (OPA) por el cien por ciento del capital de la petrolera, con la novedad de que ninguna de ellas tiene los recursos necesarios.
El problema, pues, según ello, no es la compra de un nuevo paquete accionario por parte de la empresa pública mexicana, sino la maniobra de Sacyr para apuntalar su influencia en Repsol, en afán de reforzar sus expectativas para renegociar una colosal deuda.
Dicho con todas las letras, Pemex se metió entre las patas de los caballos al aliarse con un empresario voraz que pelea por su causa, más que por la petrolera.
Quién le manda al director general de la empresa pública, Juan José Suárez Coppel, tener amigos como Luis de Rivera.
Lo cierto es que frente a la andanada que intentó involucrar a la Comisión Nacional de Energía de España, quien decidió lavarse las manos; que provocó la furia antiMéxico del derechista Partido Popular; quien desnudó ante la opinión pública hispana los mil y un pecados de corrupción en Pemex, se dijo que ésta enfrentaba un conflicto de interés; que pretendía llevar a su causa la tecnología de Repsol, y que se constituía en algo así como quinta columna contra ésta.
Y lo cierto, del otro lado de la moneda, más allá de que las inversiones españolas en el sistema financiero nacional representan las mayores ganancias para sus matrices, llámense Bilbao Vizcaya Argentaria o Santander, México se ha convertido en algo así como la tabla de salvación de la Madre Patria frente a la aguda recesión que enfrenta.
Los contratos de obra pública que allá fluyen en cuentagotas, aquí se multiplican en favor de constructoras hispánicas.
Se diría que en México, a contrapelo de perder la "mexicanidad", se privilegia al capital español frente al nacional.
Más aún, Pemex le otorgó hace seis años a Repsol un jugoso contrato para traer gas natural de Perú, pagándole un inaudito precio de reventa.
EL FLUJO SIGUE VIGENTE
Digamos que los españoles no quieren pasar por ingratos, por más que se les "chispoteó" una catarata de improperios.
La paradoja del caso es que el sueño de Pemex de internacionalizarse se inició justo en otro mal momento de España. Estamos hablando de 1979, cuando adquirió el 34.28 por ciento de las acciones de la alicaída empresa Petróleos del Norte (Petronor).
Era la época en que la paraestatal estaba dirigida por Jorge Díaz Serrano. Era la época en que el expresidente José López Portillo conminaba a los mexicanos a administrar la riqueza... petrolera.
El caso es que Petronor fue absorbida 11 años después por Repsol, diluyéndose la participación de la empresa pública mexicana.
El 34.28 por ciento se convirtió en 4.68.
De tres asientos en el Consejo de Administración de Petronor, Pémex sólo tendría uno en Repsol.
La tormenta se inició justo cuando pretendía llegar a dos, vía una inversión de mil 600 millones de dólares, que ahora se cuestiona.
¿Se excedieron los españoles? ¿La "regó" Suárez Coppel al aliarse con el malo?
Operación cicatriz.
BALANCE GENERAL
A la callada, la constructora Gutsa acaba de obtener una resolución de la Sexta Sala Regional Metropolitana del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa que derriba la inhabilitación que le había impuesto la Secretaría de la Función Pública para participar en licitaciones.
La veda para obtener contratos públicos era de cinco años, castigándose a la firma por haber incumplido con los tiempos previstos en un contrato para rehabilitación de la llamada "Carretera del Sol" Cuernavaca-Acapulco.
Pese a ello, la constructora de la familia Gutiérrez Cortina fue beneficiada con un contrato del gobierno federal para construir la llamada "Estela de Luz", en conmemoración de los 200 años del inicio de la lucha por la independencia.
Como usted sabe, 13 meses después de la fecha prevista para inaugurarse, no hay indicio aún de la terminación de la obra. Peor aún, solicitado originalmente un presupuesto de 390 millones de pesos, el monto del gasto alcanza ya mil 50.
Como recordará usted, Gutsa asumió la obra del que hoy es el World Trade Center ante el fracaso de la primera constructora, encabezada por un expresidente de Concamín, con la novedad de que no pudo con el proyecto.
El edificio pasó a poder del Banco Nacional de Comercio Exterior.
OTRO PASITO
Pian pianito el Grupo México de Germán Larrea Mota Velasco sigue adquiriendo acciones en circulación del Grupo Aeroportuario del Pacífico.
Su participación alcanza ya el 36.2 por ciento del 85 que se colocó en los mercados bajo el marco de la serie B.
La inversión comprometida hasta hoy es de 480 millones de dólares.
La firma está en vías de relanzar su Oferta Pública de Adquisición por el cien por ciento del capital de la empresa que aglutina a 12 terminales aéreas.
El jaque se inició a partir del año pasado.
BANREGIO CRECE
Quien colocará en los próximos días una emisión accionaria en el piso de remates de la Bolsa Mexicana de Valores es el Grupo Financiero Banregio, al que integran el Banco Regional de Monterrey y una Sociedad Financiera de Objeto Múltiple denominada AF Banregio.
La colocación será por 150 millones de pesos que apuntarán a un incremento de capital para una y otra instituciones.
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