La calificadora estadounidense de deuda Moody's acaba de degradar la calidad crediticia del banco Interacciones de un lejano D con tendencia positiva a tendencia negativa, lo que encarecería la posibilidad de colocaciones de deuda de la intermediaria.
La lista de motivos señala que la exposición crediticia individual del banco en Coahuila representa su mayor riesgo.
El monto asignado equivale a 2.2 veces la base del capital de la intermediaria.
Más aún, se acusa a Interacciones de haber minimizado su riesgo al reportar en 2010 que la deuda con la entidad federativa representaba el 10% de su cartera crediticia.
Lo grave del caso es que la degradación llega cuando parecía haberse pactado un respiro para los bancos acreedores, al firmarse un acuerdo de refinanciamiento del débito con la totalidad de las sociedades crediticias comprometidas, que permite la redención de éste en un lapso de 20 años... con opción de duplicarse.
Además de Interacciones están comprometidos con la colosal piñata Banorte, Banamex, BBVA Bancomer, Santander, Banco Mifel, Banco del Bajío, Scotiabank, Afirme, Banregio y Bansefi.
Del lado oficial inyectaron el colosal débito Nacional Financiera y el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos. Como usted sabe, al inicio del gobierno de Moreira la deuda de Coahuila se ubicaba en 323 millones de pesos, saltando en los cinco años que duró éste a 31 mil 934 millones.
El tamaño de ésta superó las marcas que habían implantado a nivel federal los ex presidentes Luis Echeverría y José López Portillo, quien llegó a enfrentar la disyuntiva de una moratoria.
El acuerdo de reestructura pactado con los bancos dado a conocer, en atención a la gran cantidad de involucrados, por la propia Asociación de Bancos de México, implicó un refinanciamiento de 33 mil 867 millones de pesos, prorrateado en consonancia a la exposición de cada una de las intermediarias.
Digamos que para lograr saltar del corto o mediano hacia el largo plazo en la redención del colosal débito, Coahuila debió incrementar en casi 2 mil millones de pesos éste. La posibilidad la había avalado en una tormentosa sesión en que se cruzaron insultos, acusaciones y hasta algunos golpes en el Congreso local dominado por los priistas.
El sí implicó hipotecar prácticamente la totalidad de las participaciones federales de la entidad durante dos décadas.
De ahí que, sin haber tomado posesión aún, el gobernador electo de Coahuila, Rubén Moreira, quien llegará a la silla por derecho de sangre, se sumó a la peregrinación hacia el Congreso en demanda de más recursos federales.
Lo grave del caso es que durante años el gobierno estatal, ante el silencio cómplice de los bancos privados acreedores, ocultó la magnitud de la deuda, lo que provocaría una baja brutal en su calidad crediticia.
Más aún, en el camino se falsificaron dos supuestos acuerdos del Congreso local que le permitían a la entidad federativa incrementar su endeudamiento en 3 mil millones de pesos.
El ilícito fue denunciado ante la Procuraduría General de la República en doble acción por la Procuraduría Fiscal de la Federación.
El requisito del aval de los diputados lo reclama la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para garantizar que la entidad federativa estaba conforme con comprometer parte de las participaciones federales.
Los documentos ilegales, avalados por el hasta agosto pasado secretario ejecutivo del Sistema de Administración Tributaria de Coahuila, Héctor Javier Villarreal, fueron entregados a la Unidad de Coordinación de Enlace con entidades federativas de Hacienda.
La magnitud del escándalo provocó versiones de que se destituiría al dirigente priista Humberto Moreira, quien fue arropado por la mayoría de ex presidentes del partido tricolor.
Por lo pronto Interacciones, cuya cabeza es el ex aspirante priista al gobierno del Estado de México, Carlos Hank Rhon, está en la picota.
BALANCE GENERAL
Con la caída registrada ayer, la acción de Cementos Mexicanos acumula en el año un retroceso en su cotización de 70%, ubicándose en niveles similares a 1998.
En 10 meses, pues, el precio del papel se cayó 13 años. Lo grave del caso es que la firma, sembrada como la cuarta del planeta en su campo, no tiene para dónde hacerse: colocadas la mayor parte de sus opciones en Estados Unidos y la Unión Europea, con énfasis en España, la demanda de cemento en éstos se ha contraído el mínimo. Y aunque la salida habla de vender activos no estratégicos por mil millones de dólares, el monto no garantiza los abonos de su colosal deuda, lo que constituye, justo, la preocupación de los inversionistas.
Los focos rojos se encendieron desde el 2007, cuando la empresa encabezada por Lorenzo Zambrano realizó la madre de todas sus adquisiciones: la firma australiana de materiales de construcción Rinker. La operación se pactó en 15 mil 306 millones de dólares, cuyo monto obligó a la cementera a triplicar su deuda.
Dos años después perdió su calidad crediticia superior, es decir el llamado grado de inversión.
HIERVE MONTERREY
En una faceta más del escándalo provocado por la defraudación a bancos e inversionistas que financiaron la construcción de una torre en la zona del Obispado de Monterrey, se está involucrando a familiares de la ex funcionaria foxista María Teresa Herrera Tello.
Hete aquí que un hijo de ésta, Oscar Andrés Hernández Herrera, funge como administrador único de la firma COI a quien se acusa de haber otorgado garantías por sendos préstamos millonarios a Banorte y Bancomer, que previamente se había comprometido con otras instituciones.
De hecho, el presidente de la firma, José Garza de la Garza, por cierto notario 106 de Monterrey, se encuentra preso en la cárcel de Apodaca.
El caso es que los documentos presentados por éste para certificar que las propiedades en prenda estaban libres de gravámenes, fueron avalados por el notario 132 de General Escobedo, Nuevo León, Armando Hernández Berlanga... esposo de la que fuera directora jurídica de la Presidencia de la República y secretaria de la Reforma Agraria.
El escándalo, pese a la aprehensión del ex alcalde de la capital de Nuevo León, Adalberto Madero, y el viaje a Disneylandia del gobernador, Rodrigo Medina, alcanza decenas de decibeles.
