El alcalde de Monterrey, Nuevo León, Fernando Larrazabal, informó que el casino Royale operaba con un amparo federal, porque incumplía con los reglamentos locales. En conferencia de prensa, explicó que el establecimiento es propiedad de la empresa Atracciones y Emociones Vallarta, S.A de C.V.
La compañía fue constituida el 17 de marzo de 1992, de acuerdo con la documentación que aparece en el permiso de juegos otorgado el primero de junio de 1992 por la Secretaría de Gobernación, con unas vigencia de 25 años.
El permiso indica que Rodrigo Aguirre Vizzuett es el accionista principal de Atracciones y Emociones Vallarta, compañía que tiene en operación 26 centros de apuestas remotas y 26 salas de sorteos de números.
La familia Aguirre Vizzuett se deslindó anoche de la propiedad, con el argumento de que el casino Royale pertenece a Ramón Madero Dávila, propietario de la línea aérea Aviacsa.
De acuerdo con datos publicados entre 2007 y 2010, la empresa CYMSA Corporation es operadora del casino Royale y ha utilizado las licencias de Atracciones y Emociones Vallarta de Rodrigo Aguirre Vizzuett.
