La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) condenó hoy la negativa de Cuba a renovar la credencial de prensa a un corresponsal español y señaló que eso es muestra de la 'intolerancia a la crítica y el miedo a la libertad'.
El corresponsal del diario El País y de la Cadena Ser de España, quien trabaja en Cuba desde 1991, Mauricio Vicent, fue informado de que el gobierno cubano no renovaría su permiso de trabajo al considerar que ofrece una imagen "parcial y negativa" de la nación caribeña.
El presidente de la SIP, Gonzalo Marroquín, indicó que el régimen cubano actúa siempre de la misma manera', en referencia a que cada vez que recrudece la represión contra disidentes en este caso las Damas de Blanco, 'cercena la libertad de información'.
La acusación de parcialidad de Vicent fue rechazada por el diario español, que destacó como 'ejemplo de profesionalidad, imparcialidad y equilibrio' la trayectoria del periodista.
El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, Robert Rivard, recordó a su vez denuncias de la organización de que 'los corresponsales extranjeros son vigilados de cerca y el control oficial es estricto'.
Esto con el fin de 'conminarlos a no cubrir temas sensitivos que pudieran afectar su estadía legal en el país, convirtiendo la autocensura en una práctica común, según ha reconocido algunos de ellos', agregó.
El Reglamento para el ejercicio de la prensa extranjera en Cuba, establece que el Centro Internacional de Prensa puede suspender o retirar la acreditación cuando el titular realice acciones impropias o ajenas a su perfil.
Así como cuando se considere que ha faltado a la ética periodística y/o no se ajuste a la objetividad.
