El Dalai Lama, Premio Nobel de la Paz, quien visitará México del 8 al 12 de septiembre próximos, no sostendrá encuentro con el presidente Felipe Calderón durante su estancia en el país.
Marco Antonio Karam, presidente de la Casa Tíbet México, informa que la solicitud para concretar dicha reunión fue hecha en enero de este año al gobierno de México. "No hemos tenido respuesta y damos por hecho, a estas fechas, que no se concretará".
Asegura que este desaire se origina por la presión diplomática del gobierno chino al mexicano, pues considera separatistas las ideas del Nobel, quien hasta antes del 30 de mayo era el líder del pueblo tibetano en el exilio.
En 1949, el gobierno chino invadió Tíbet y desde entonces está bajo su hegemonía.
Karam no encuentra justificación para que el Ejecutivo rechace una recepción con los honores que merece el Dalai Lama, y más luego de su renuncia que lo hace presentarse sólo como un líder moral, un civil sin cargo político.
"El presidente Barack Obama acaba de recibir al Dalai Lama en la Casa Blanca. Un Estado soberano como el de México no debería ser presionado por el Estado chino para reunirse con él. Felipe Calderón recibe a futbolistas y actores, me parece ridículo que no lo vea (al Dalai Lama), especialmente cuando se trata de una persona dotada de mayores honores que él, mucho más apreciado a nivel global que él o su gabinete o cualquier miembro del Estado mexicano", dice Karam.
Al ser consultada sobre estas declaraciones, la embajada de China en México afirmó que en unos días dará a conocer su posición.
Karam precisó que la intención de una reunión entre Calderón y el Dalai Lama fue hecha a la Secretaría Particular de la Presidencia, que se limitó a decir que la petición está en proceso, pero se negaron a explicar los motivos.
Por su parte, fuentes de la Secretaría de Relaciones Exteriores dijeron no tener conocimiento de la solicitud.
Esta sería la tercera visita del líder moral tibetano a territorio mexicano. En su primera oportunidad, en 1989, fue recibido personalmente por Carlos Salinas en Los Pinos; en 2004, por jefe de Gobierno Andrés Manuel López Obrador, así como por Marta Sahagún, esposa del exmandatario Vicente Fox.
Casa Tíbet acusa incongruencia, pues el 23 de septiembre de 2004, en una gira por Guanajuato, Calderón dijo: "Tengo la convicción que México no debe permitir condicionar su política a los dictados o caprichos de un país por poderoso que sea, sea China, sea EU. México debe determinar con absoluta autonomía con quién se reúne".
