Se ayudan. De los recursos captados por concepto de predial y otros impuestos echarán mano las autoridades para cubrir la nómina. EL SIGLO DE TORREÓN / EDITH GONZÁLEZ
De nueva cuenta el municipio enfrenta dificultades para cubrir el pago de nómina, debido a que las participaciones federales no han llegado en su totalidad y la administración ha comenzado a realizar pagos de préstamos y proveedores que quedaron pendientes del año pasado.
Desde el último semestre de 2010, Matamoros se vio en dificultades para alcanzar a cubrir los salarios de los más de 400 empleados del municipio a causa de la poca generación de recursos propios y a lo abultado de la nómina.
La situación a fines de año se preveía similar para 2011 pues el Municipio comenzaría a pagar el préstamo de más de 40 millones de pesos solicitados por la administración pasada. Sin embargo, en esta segunda quincena, la situación se tornó más crítica debido a que el Ayuntamiento deberá cubrir también la nómina de Seguridad Pública, toda vez que la participación federal que la solventa, no ha llegado.
"Estamos un poco apretados. Con recurso propio y la primera participación sacamos los compromisos de la primera quincena y la nómina, pero no tenemos Fortalecimiento y la nómina de Seguridad Pública se paga con esta participación. Lo que vamos a hacer es una especie de préstamo de recurso propio para cubrirla, y cuando llegue, saldaremos ese préstamo", dijo Horacio Saucedo, tesorero municipal.
Mencionó que además, el Municipio tuvo que cubrir varios pagos que tenía pendientes con proveedores con los recursos generados por el pago del Predial en este mes y la primera partida de una participación estatal, lo que los dejó "apretados" para la segunda quincena.
"La segunda quincena el pago de nómina es la principal preocupación porque además de los pagos que ya hicimos en los días últimos nos rebajan del programa Mano con Mano...va a estar apretado para sacar esta nómina, pero confiamos en que lo vamos a hacer", dijo.
Suspenden negociaciones
Se entramparon las negociaciones que el Ayuntamiento de Matamoros y el sindicato llevan para la firma del contrato colectivo debido a que el Municipio no acepta el "blindaje" que quiere imponer el sindicato con la cláusula de admisión y expulsión. Ayer a las 8:00 de la mañana los comités representantes de ambas partes se reunieron para evaluar las siete cláusulas que quedan pendientes. Sin embargo, al tocar la cláusula 18 de Admisión y Expulsión que consiste en que los contratos de los trabajadores manuales y administrativos así como la rescisión de sus servicios sean competencia del sindicato, las negociaciones se pararon. "Con la cláusula de exclusión por admisión blindaríamos al sindicato... decidimos levantar las negociaciones porque ellos pedían que avanzáramos en las otras seis y para nosotros esta cláusula es la más importante dentro del contrato colectivo", dijo David Montiel, secretario general del sindicato.
