El peso de la cruz. Decenas de católicos lerdenses acompañaron a Jesús en su trayecto al calvario, en la colonia San Isidro.
Bajo los quemantes rayos del sol se llevó al cabo el Vía Crucis viviente en Lerdo, con la participación de jóvenes y adultos católicos, seguidos de cientos de personas que recorrieron dos kilómetros hasta llegar a la Iglesia de Guadalupe, en la colonia San Isidro.
Bajo la asesoría del párroco del Sagrado Corazón de Jesús, Rubén González, los jóvenes iniciaron el Vía Crucis en la Plaza Principal -donde tuvo lugar la interpretación del juicio y condena de Jesús-, para de ahí partir por la avenida Francisco Sarabia y tomar la Allende hacia el poniente, hasta la Iglesia de Guadalupe, donde eran esperados por los fieles de ese templo.
Cada una de las 14 estaciones, fueron explicadas por el párroco, sobre el episodio de la Pasión del Señor. En este ejercicio piadoso, las estaciones tienen un núcleo central, expresado en un pasaje del Evangelio o tomado de la devota tradición cristiana, que propone a la meditación y contemplación uno de los momentos importantes de la Pasión de Jesús.