Tras rendir su declaración ante las autoridades ministeriales, el abogado Carlos Emigdio Arozqueta Solís fue dejado en libertad al comprobar que no participó en el homicidio del ex alcalde de Ajacuba, Abel Guerrero García.
El ex presidente municipal fue atacado a balazos el pasado lunes en un centro comercial de Pachuca y tras dos días de permanecer en terapia intensiva del Hospital General, ayer perdió la vida.
Por la noche, la Secretaría de Seguridad informó que en cumplimiento de un mandamiento ministerial, girado por el agente del ministerio público determinador, se presentó al abogado; sin embargo, Arozqueta Solís, al rendir su declaración en la que se investigó su relación con el ex alcalde y las llamadas de sus teléfonos celulares, tras no encontrar pruebas quedó en libertad, sin ninguna restricción.
Según versión del abogado no tuvo en sus manos ningún documento cobrable y la relación con el ex edil terminó en octubre del año pasado.