La mayoría de alemanes ven con optimismo el 2012 debido a que se reducirán algunos impuestos y contribuciones y se simplificarán algunas gestiones burocráticas, mientras para otros empezará a aumentar la edad de jubilación de 65 actuales a 67 años.
Los impuestos y contribuciones que principalmente disminuirán son los de la red social, que incluyen el seguro médico, el seguro de desempleo, el seguro para la jubilación y el seguro para la incapacidad total por senilidad o enfermedad.
Bajarán del 40 por ciento del salario gravable a 40.2 por ciento, lo que dejará mas dinero en la cartera de los alemanes
Se reducirán también algunos impuestos para las familias con hijos. Las autoridades calculan que una familia de clase media con un ingreso promedio tendrá 125 euros más en el portamonedas en comparación con el presente. La mayor parte de la población alemana pertenece a la clase media.
El único cambio que no es visto con buenos ojos es el del incremento de la edad para poder jubilarse. La pensión con 67 años empezará a introducirse en forma paulatina a partir del 2012.
Solo podrán seguirse jubilando con 65 años los que hayan nacido antes de 1964, quienes hayan trabajado durante 47 años así como los discapacitados.
La primera generación que deberá trabajar hasta los 67 años para poder jubilarse es la que nació a partir de 1964. En 2029 entrará la medida completemente en vigor.
La introducción de la pensión con 67 años ha sido objeto de acaloradas discusiones en Alemania. Quienes están a favor argumentan que los alemanes viven cada vez mas largamente al mismo tiempo que el número de los contribuyentes que paga las jubilaciones se reduce.
Lo anterior es un efecto del retroceso demográfico de la población alemana, ya que cada año mueren mas de los que nacen. Por lo tanto, entra en funciones lo que los alemanes llaman el Pacto de las Generaciones.
Quienes están en contra aseveran que los efectos de la tendencia demográfica de la población alemana fueron exagerados, y que éstos están quedando compensados por el alza en la productividad y por el aumento del empleo en el país.
Según esa corriente de opinión, la jubilación a los 67 años no es sino una maniobra encubierta y masiva para recortar los pagos del estado por concepto de jubilación.
