Hubo una estupenda entrada en el Complejo Panamericano de Voleibol para el encuentro inaugural entre Estados Unidos y Puerto Rico.
Largas filas sobre la avenida Ávila Camacho. Automovilistas buscando dónde estacionarse sobre las calles aledañas. Acceso lento. Revisión minuciosa. Seguridad al máximo. La presencia de un equipo estadounidense obliga a ello. Así comenzó la actividad del voleibol femenil, dentro de los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011.
El público tapatío realizó una estupenda entrada en el Complejo Panamericano de Voleibol para el encuentro inaugural entre Estados Unidos y Puerto Rico. Fue apenas el primero de la jornada y terminó con triunfo norteamericano en tres sets corridos, por parciales de 25-17, 25-18 y 25-14.
Los gritos se hicieron presentes desde el primer set. El apoyo fue por completo para las boricuas. El "¡Puerto Rico!" acompañado por palmas hizo vibrar el escenario panamericano. Sin embargo, no fue suficiente.
La afición vibró con los remates de la puertorriqueña Aurea Cruz, quien taladró la defensa estadounidense cada vez que se lo propuso, con su espigada figura. Pero se necesita mucho más para superar a una de las selecciones que aspira a la medalla de oro.
Sarah Venegas, capitana de Estados Unidos, es quien da equilibrio a su sexteta. Cynthia Barboza es un peligro cuando está cerca de la red y salta para rematar. El poder norteamericano quedó en evidencia al ganar el primer set por 25-17.
El segundo episodio del encuentro comenzó con ventaja boricua, gracias a los estupendos bloqueos de Lynda Morales. La afición local despertó. La batucada colocada en una esquina se dejó escuchar mucho más que en el primer ser. Fue sólo una herida en el orgullo estadounidense.
Vestidas con camiseta roja, las norteamericanas vinieron de atrás. Tomaron la ventaja y ya no la soltaron. Cynthia Barboza fue una pesadilla para la defensa boricua. Lauren Bibbemeyer contribuyó con bloqueos en la red. El triunfo parcial fue de 25-18.
El tercer y definitivo set fue la confirmación de que Estados Unidos vino a los Juegos Panamericanos por la medalla de oro. Angela Forsett demostró que aunque no es la más alta del equipo, su depurada técnica de salto la convierte en una estupenda defensora. Sus apariciones evitaron puntos de Puerto Rico en momentos clave, cuando todavía existía alguna esperanza.
Puerto Rico tuvo un intento de reacción. Amanda Vázquez tuvo dos estupendos fildeos, aguantó el bombardeo estadounidense, pero las candidatas al título exhibieron sus grandes recursos con una "dejadita" de Carly Lloyd, que significó el punto 16 del tercer set.
El final fue dramático, las estadounidenses salvaron una pelota que parecía perdida, lograron pasarla de la red y un bloqueo de Gibbemeyer decretó el 25-14 que significó la primera victoria de las norteamericanas, en el voleibol de los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011.
Pero quizá el triunfo más grande no estuvo en la cancha, sino en la tribuna, donde la afición respondió y vibró con sus Juegos Panamericanos. La ola despidió a los equipos. El ambiente de la justa continental arde.