Dejarán armas.Rebeldes que se entregaron a las armas, ahora empezarán las búsqueda de empleo.
Cientos de exrebeldes libios que ayudaron a derrocar a Muamar Gadafi estuvieron ayer llenando solicitudes de empleo con el nuevo gobierno como primer paso para el desarme, dijo el ministro del Interior.
Fawzy Abdul-Alí señaló que se pedirá a los exrebeldes que entreguen sus armas después de capacitarse y trabajar para el gobierno.
La incontrolable portación de armas ha sido una enorme preocupación de seguridad desde el final de la guerra civil de ocho meses que costó el poder y la vida a Gaddafi en octubre. Milicias revolucionarias rivales que continúan armadas se han enfrentado con regularidad.
Abdul-Alí dijo que los exrebeldes tendrán hasta el fin de enero de 2012 para solicitar empleos en el gobierno a través de consejos militares locales que distribuyen las solicitudes.
Ibrahim al-Khamsy, de 50 años, espera obtener empleo en una instalación petrolera, como el que tuvo durante 13 años. Además espera que el gobierno nuevo lo compense por los años que estuvo desempleado después de que funcionarios del régimen de Gadafi lo despidieron en 1990. "Espero poder regresar a mi empleo antiguo, pero ellos deben tomar en cuenta esos años de experiencia... o darme un aumento", comentó.
Las opciones
Mohamed al-Shatewi, un miembro de uno de los consejos militares de Trípoli, dijo que los exrebeldes pueden presentar una solicitud para unirse a las fuerzas armadas, al Ministerio del Interior, a una institución civil o continuar su educación y estudiar en el extranjero.
En las solicitudes se pregunta a los exrebeldes a qué brigada pertenecen, cuál fue su rango durante el levantamiento y los números de serie de las armas que poseen. También se les pregunta información personal concerniente a su educación, estado civil y si fueron heridos durante la insurrección.