Costo. Por cada uno de los validadores instalados en los autobuses de la CTM se gastaron entre 35 mil y 42 mil pesos, según se informó. ARMANDO ACEVEDO / EL SIGLO DE DURANGO
El retraso en la instalación de validadores para la credencial obligatoria del transporte ya está provocando fricciones entre choferes y estudiantes, reconoció el secretario de Organización de la CTM, Juan Mercado Gutiérrez.
"Tenemos un retraso en cuanto a los validadores, no por culpa de nosotros sino por los instaladores que en un principio le hicieron al flojo (sic)", mencionó.
Luego de reconocer que todavía faltan por colocar entre 60 y 70 lectores, refirió que el retraso no ha impedido que se exija la credencial para la tarifa preferencial lo que ha generado fricciones. "Tiene que haber problemas porque le dejaron una responsabilidad muy grande al chofer que tiene que estar valorizando la credencial sin traer el validador", dijo.
Estimó que a finales de este mes estará concluida la instalación de lectores en los 300 autobuses de la CTM.
Afirmó que, en una reunión previa, se le advirtió al Director de Transportes del Estado sobre los problemas que se iban a presentar con la entrada en vigor de la medida e incluso se pidió una prórroga, solicitud que no fue considerada.