Asistencia. Sólo seis legisladores acudieron a todas las sesiones realizadas en tres meses, dos veces por semana.
Sólo seis de los 30 diputados locales de la actual Legislatura en Durango acudieron a las 31 sesiones celebradas en el pasado período ordinario de sesiones. Es decir que el 90 por ciento de los legisladores registró inasistencias en las actas de cada una de las sesiones realizadas entre el 15 de marzo y el 15 de junio de este año.
Según la Ley de Egresos del 2011, aprobada por el propio Congreso del Estado, el salario mensual de cada diputado es de 68 mil 541 pesos; esto significa que entre marzo y junio cada diputado percibió 274 mil 164 pesos de sueldo; durante ese mismo lapso se celebraron 31 sesiones ordinarias, a las cuales la gran mayoría no acudió.
El artículo 37 de la Ley Orgánica del Congreso del Estado enfatiza que los diputados no deben percibir el salario correspondiente a las sesiones a las que faltan.
LOS MÁS FALTISTAS Jaime Rivas Loaiza y Lourdes Quiñones Canales, ambos del Partido Revolucionario Institucional (PRI), fueron los que más faltas tuvieron, con ocho en total.
Rivas Loaiza, diputado por el distrito local VII, justificó cinco de sus inasistencias; Quiñones Canales, legisladora por la vía plurinominal, justificó siete.
La diputada priista Leticia Herrera Ale acumuló seis inasistencias en tres meses; cuatro fueron justificadas. También el priista Enrique Benítez Ojeda, representante del distrito IV, faltó a cinco sesiones ordinarias sin justificación. Gina Campuzano González, diputada panista por el distrito II, tiene dos inasistencias y dos faltas justificadas; José Nieves García Caro, diputado plurinominal del Partido Nueva Alianza acumuló cuatro faltas justificadas. En total son 24 diputados locales los que tuvieron por lo menos una falta justificada.
Miguel Ángel Olvera, Adrián Valles Martínez, Emiliano Hernández Camargo, Felipe de Jesús Garza, Jorge Salum del Palacio y Aonso Palacio Jáquez, fueron los únicos acudieron a todas las sesiones.
EL SIGLO DE TORREÓN
