"SANANDO EL REMORDIMIENTO"
(Parte 1)
Don Juan había muerto sin que Claudia hubiera cerrado el círculo de la reconciliación, así que era algo que la atormentaba y no la dejaba en paz, ya que a pesar de la dedicación a los negocios y haber hecho las cosas bien, se había quedado con aquella experiencia de no haber cumplido con la última instrucción de don Pedro, la pila de su celular, era algo que la atormentaba y le quitaba el sueño, pues cuando tenía oportunidad prefería evadir aquel recuerdo a través del sueño, pasaba largo tiempo de su vida en la profundidad de la depresión. No tenía ganas de nada, se le iba el apetito y pasaban los días sin salir de su cama, apenas se levantaba para cubrir sus necesidades más apremiantes.
Muchas personas están muertas en vida, sumidas en ese estado donde no hay una ilusión por vivir, se vive porque no hay otra alternativa. Pero un día después de mucho llorar y desesperada por el estado de abandono en que estaba, se dijo así misma -¡Ya basta!- tengo que buscar ayuda, entonces fue cuando le hizo caso a su amiga Edelmira, quien le había sugerido visitar a un amigo que podría ayudarle. Más por agotamiento de la situación en que estaba, que por otra cosa, alcanzó el teléfono y marco el número que le habían proporcionado. Sonó tres veces sin que contestaran, -pensó en colgar y mejor no intentarlo, pues qué caso tenía, quien la comprendería en el estado en que estaba y las causas de su muerte en vida- a la cuarta vez sonó una voz varonil muy amable. Buenas tardes despacho de... Hay veces que Dios nos manda a personas o Ángeles sin alas para ayudarnos cuando de verdad se lo pedimos. Quisiera hablar con el Sr. Germán, él habla en qué puedo servirle. Soy Claudia amiga de Edelmira, ella me proporcionó su teléfono y quisiera saber si me puede recibir. Por supuesto, con mucho gusto, ¿cuál es su problema? Pues fíjese que... Claudia sintió como si a través del teléfono había una pequeña lucecita de esperanza, su corazón le decía que podía ser por ahí. ¿Le ha pasado que cuando se pregunta algo, siente como que Dios nos hablara a través de una persona, del radio o de cualquier cosa? Pues en verdad lo hace cuando empezamos a escuchar esa vocecita interna llamada intuición por muchos, Dios por otros. En eso quedamos nos vemos el jueves a las 5 de la tarde. Se llegó el día de la cita y Claudia por primera vez en mucho tiempo sintió esa chispa de arreglarse y ponerse su perfume favorito. Ansiosa de llegar a la dirección indicada, sentía como si el día fuera especial y una llama de paz sintió en su corazón. Faltaban cinco minutos para la hora acordada, estacionó su camioneta frente al domicilio señalado. Dio un suspiro y decidida se dirigió a su cita. Buenas tardes soy la Sra. Claudia, tengo cita a las 5, -un momento por favor, ¿gusta sentarse?-. Se sentía un poco nerviosa, ¿sería realmente que encontraría respuestas a sus recuerdos que la atormentaban desde la muerte de su padre? -Pase usted por favor la están esperando- con pasos un poco inseguros se dirigió a la puerta del consultorio donde la esperaba un encuentro con sus recuerdos. Señora Claudia, mucho gusto siéntese por favor, entró a ese lugar donde las paredes lucían un color azul tenue que nos invita a la calma y la tranquilidad, echó un vistazo rápido al lugar mientras Germán se acomodaba al otro lado del escritorio en un sillón café claro. Detrás del escritorio se encontraban dos libreros bien ordenados y al centro un título y reconocimientos acomodados de manera estética. Con una mirada apacible y con toda la atención puesta en ella, Claudia empezó a narrarle paso a paso, lo que había pasado durante su vida y lo crítico que fue el desenlace de la partida de don Pedro, y el gran dolor que se había quedado en ella desde entonces... Muy bien -dijo Germán- vamos a entrar en materia, pase por favor Claudia al diván, un sillón café muy cómodo, que al acomodarse se sintió como en las nubes, en verdad estaba muy cómodo y te invitaba a relajarte. Germán puso una música de sonidos de la naturaleza, y mientras daba algunas instrucciones hacia una relajación profunda, Claudia se fue soltando poco a poco, toda la tensión que había sentido todo este tiempo simplemente se fue desapareciendo.
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Decía Jesús, "No me digas que me amas, dime cómo vives", "La familia que reza unida, permanece unida", "Sígueme este domingo a misa". Iniciativa laguna un proyecto de valor y de valores de los laguneros y para los laguneros y el mundo! Esperamos como siempre sus comentarios en: despertar_es@live.com. Lo invito a visitar mi blog en donde encontrará más artículos de su interés. www.familia.blogsiglo.com
