A quince días de que concluya el periodo ordinario de sesiones, el presidente Felipe Calderón Hinojosa envió una iniciativa al Senado para castigar penalmente a quienes -premeditadamente o no- ayuden a los miembros del crimen organizado y narcotráfico. Y por primera vez, abre la posibilidad, de sancionar a los bancos que resulten responsables de la comisión o participación en un delito.
La oposición no recibió con buenos ojos el documento. El senador del PRD, Pablo Gómez Álvarez -integrante de la Comisión de Justicia, una de las encargadas de dictaminar la iniciativa- lamentó que Calderón Hinojosa ya "no sabe ni qué inventar ante el fracaso de su estrategia de inseguridad".
La iniciativa -que apareció publicada hoy en la Gaceta Legislativa---, propone crear nuevos tipos penales en el Código Penal Federal, el de la confabulación y facilitación delictiva.
Los informantes de los narcotraficantes prácticamente serán sancionados al mismo nivel de quienes participen directamente en el lugar de los hechos.
Según el Ejecutivo, es necesaria castigar por la vía penal a aquellos sujetos que actúen produciendo o facilitando el delito, incluso, "sin la intención directa de cometerlo", cuando por cualquier medio tengan conocimiento o posibilidad de conocer que su actuación concatenada a otras conductas individuales o de grupo es idónea para que se realice.
El documento explota la figura del "injusto colectivo", que abre la posibilidad de señalar penalmente a quienes "de alguna forma participan o se benefician" de los ilícitos del colectivo.