Lo que fue una tarde escalofriante se transformó en pérdida y tragedia. Luego de lo ocurrido el domingo en la Plaza de Toros "Nuevo Progreso" de Guadalajara, cuando de la puerta de los sustos salió el tercer novillo llamado "Norteño" de la ganadería de El Vergel.
El burel en su salida y recorrido sorprendió a medio mundo cuando brincó al callejón y empitonó aparatosamente al monosabio Salvador Hernández, la cornada que recibió fue por demás grave, ya que penetró el tórax y llevándolo colgado del pitón le dio la vuelta por unos 50 metros, la herida penetró hígado y pulmón, el pronóstico de inicio era negativo. Los médicos de plaza lograron estabilizarlo en la enfermería para posteriormente trasladarlo al Hospital San Javier, donde permaneció hasta la mañana del martes 13, cuando alrededor de las 5:00 a.m., momento en el cual su cuerpo terminó de resistir y desafortunadamente falleció.
Esta situación ha generado que en diferentes plazas se hayan dado reacciones acerca del cómo debe estar ordenado un callejón, luego de lo lamentablemente ocurrido en Guadalajara, Jalisco. Primer municipio del país en el cual se acordó tanto por parte de la empresa, como el sindicato de servidores de la Perla Tapatía, que sólo trabajaran en el callejón personas menores a 50 años y en buen estado físico.
En Saltillo, también la empresa y las autoridades municipales, señalaron que aplicarán acciones para evitar accidentes como el ocurrido en Guadalajara, el gerente de la empresa taurina local Promezap, José Rodríguez Luévano, manifestó que para la próxima corrida se les va a advertir a todos los que pidan acreditación al callejón, y posteriormente se citará a las personas involucradas para plantearles la situación y regular a bien el acceso al callejón.
Importantes serán las medidas que en cascada deberán de tomar en todas las plazas de la república mexicana, con el fin de contar con un mayor control en los callejones, en el caso de La Laguna sus Plazas se distinguen por callejones sobrepoblados de aficionados, incluso que entorpecen el quehacer de los monosabios (personas que mejor se saben mover en el según los tercios de la lidia) y que en infinidad de ocasiones han rescatado de las garras de la muerte a toreros y subalternos.
El caso de don Salvador Hernández (de 66 años) fue totalmente fortuito. Pero es el claro ejemplo de lo que puede pasar en cualquier plaza de no tomar medidas estrictas al respecto, como la determinación de excluir en el callejón a las personas mayores de 50.
Esto es algo que habrá que analizar en el específico caso de la función que desempeñen o no, puesto que por contraparte existen personas de menos de 20 años (y/o mayores) que nada tienen que hacer en el callejón y que lo hacen sólo por la emotiva inyección de adrenalina o por dejarse ver como amigos del torero, ganadero o empresario.
Lo que sí, esperemos en el caso específico de la Comarca , es que el ejemplo sirva para que los jueces de plaza y de callejón de los tres ruedos de la región tomen cartas en el asunto. Y sólo permitan esta anuencia a quienes verdaderamente desempeñen una "labor necesaria" en el callejón.
Ulisesrivera7@yahoo.es
