La calificadora Fitch Ratings mantiene estable su perspectiva de 2012 para el sistema bancario mexicano, a pesar de mayores retos, dado que los bancos mantendrán sus principales fundamentos crediticios en esta fase de deterioro del ciclo económico.
Dependiendo de la extensión y magnitud de la desaceleración económica, la calificadora espera un impacto 'de bajo a moderado' en los indicadores sectoriales de calidad de activos y rentabilidad, pero los índices de solvencia y liquidez deben permanecer relativamente robustos.
En un reporte de perspectivas, Fitch apuntó que los bancos mexicanos tienen limitada exposición directa, si acaso, a la delicada situación que enfrentan algunos bancos globales en la actualidad.
Sin embargo, apuntó, 'el riesgo de contagio del exterior se mostrará principalmente en menores perspectivas de crecimiento económico, incluso respecto al débil desempeño del país en años recientes, lo que probablemente pondrá cierta presión en la calidad de los activos y la rentabilidad del sistema bancario mexicano'.
La agencia consideró que un escenario positivo de calificaciones es poco probable en el futuro cercano, dado que la capacidad de la mayoría de los bancos para mejorar sus fundamentos crediticios depende en gran medida de un entorno operativo más favorable.