Labor. Los integrantes de GAPS informan a sus compañeros de escuela y de colonia sobre el autocuidado y la prevención.
Los Grupos de Adolescentes Promotores de la Salud (GAPS) se dedican a dar orientación a sus iguales a través de pláticas en escuelas y colonias, con la intención de inculcarles una cultura de autocuidado de la salud y alejarlos de conductas negativas.
El Programa de Atención a la Salud del Adolescente opera con más de 500 jóvenes adscritos a los GAPS, quienes en forma periódica reciben capacitación en temas como salud sexual y reproductiva, habilidades para la vida, salud mental y estilos de vida saludables.
La intención es que informen adecuadamente a sus compañeros de escuela o amigos del lugar en el que viven, a través de pláticas, juegos y actividades recreativas. El trabajo en equipo se desarrolla en ambientes de libertad de opinión y diversión, indicó Emilio Arreola, director de los Servicios de Salud en el Estado de Durango.
Para que el funcionamiento de los grupos sea el más adecuado, su capacitación se basa en un código de ética que incluye el respeto para realizar con profesionalismo sus tareas; responsabilidad de comprometerse con dichas labores y ser conscientes de los alcances y consecuencias.
También se basa en la colaboración conociendo y respetando las habilidades de los compañeros, así como estableciendo relaciones cordiales y de cooperación orientadas a un objetivo en común; estar dispuestos a aceptar y facilitar las revisiones de los procesos.
El compromiso, la vocación de servicio, integridad y sensibilidad también forman parte de este código de ética, se informó.